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España registra por primera vez más personas con estudios superiores que con ESO

  • El Sistema Estatal de Indicadores muestra un gran cambio en el nivel educativo de la población de 25 a 64 años desde 1992
  • El gasto educativo por alumno en España sigue siendo inferior al del año de la crisis de 2008, pese a las sucesivas subidas

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Imagen de archivo en la que varios estudiantes se examinan de las pruebas de acceso a la universidad. 
Imagen de archivo en la que varios estudiantes se examinan de las pruebas de acceso a la universidad. 

España ha registrado en 2020, por primera vez en su historia, un mayor número de personas con estudios superiores finalizados que solo con Educación Secundaria o menos: un 39,7 % frente al 37,1 %.

Así se refleja en la última edición del Sistema Estatal de Indicadores de la Educación (2021), que reúne las principales estadísticas oficiales en esta materia y que destaca un gran cambio en el nivel educativo de la población de 25 a 64 años desde el año 1992 hasta 2020.

La proporción de personas con estudios inferiores a la segunda etapa de Educación Secundaria se ha reducido prácticamente a la mitad (del 76 al 37,1 %); se dobla el porcentaje de personas con estudios de segunda etapa de ESO (del 11,3 al 23,2 %) y se triplica para Educación Superior (del 12,8 al 39,7 %).

España se encuentra 16,1 puntos por debajo de la media de la UE

“En 2020, por primera vez hay mayor porcentaje de población adulta con Educación Superior que con estudios inferiores a la segunda etapa de Educación Secundaria”, subraya la estadística.

En los países de la Unión Europea en 2020, el 79 % de la población entre 25 y 64 años posee nivel de formación de segunda etapa de Educación Secundaria o superior, lo que significa que España se encuentra 16,1 puntos por debajo de dicha media, "aunque ha de considerarse su evolución y que para la población de mayor edad, de 55 a 64 años, la distancia es de 21,7 puntos".

El nivel de formación de la población adulta es una medida del capital humano y del nivel de competencias de la población, en general, y de la población activa, en particular.

El análisis de esta variable educativa constata que las personas con niveles educativos más altos suelen tener mejor salud, mayor participación social y unas tasas de empleo e ingresos relativos más elevados.

Porcentaje por comunidades autónomas

De acuerdo con este estudio, publicado por el Ministerio de Educación y Formación Profesional, el 62,9 % de la población de 25 a 64 años terminó en 2020 al menos estudios de segunda etapa de Secundaria, incrementándose hasta el 71,7 % en el tramo de 25 a 34 años.

Entre la población de 25 a 64 años, en cuanto al nivel máximo de estudios alcanzado, el 37,1 % tiene estudios inferiores a la segunda etapa de Educación Secundaria, el 23,2 % estudios de segunda etapa de ESO y el 39,7 % ha completado estudios superiores.

Las comunidades autónomas con los mayores porcentajes de personas con al menos estudios de segunda etapa de Secundaria, en los dos grupos de edad, son Principado de Asturias (68,9 % y 80,6 % respectivamente), Cantabria (67,7 % y 81,9 %), Comunidad de Madrid (75,9 % y 80,0 %), Comunidad Foral de Navarra (71,2 % y 80,7 %), y País Vasco (75,3 % y 82,0 %).

En relación al nivel de formación por sexo, el porcentaje de mujeres con al menos estudios de segunda etapa de Secundaria es mayor que el de hombres (65,9 % frente a 59,8 % para la población de 25 a 64 años), siendo las diferencias más acusadas en el tramo de 25 a 34 años (77,1 % frente a 66,2 %), y especialmente en el nivel de Educación Superior, donde el porcentaje de mujeres supera al de hombres en 12,3 puntos porcentuales.

El gasto educativo por alumno, por debajo del año de la crisis de 2008

Por otro lado, el Sistema Estatal de Indicadores de la Educación también señala que el gasto educativo por alumno en España sigue siendo inferior al del año de la crisis de 2008, pese a las sucesivas subidas en la última década.

La información que proporciona esta estadística, en su amplia mayoría, es previa a la pandemia, por lo que, como sucedió con la crisis de 2008, sus efectos se verán reflejados durante los próximos años.

En 2019, según los datos provisionales ya disponibles, el gasto público en educación para el conjunto de las administraciones y universidades públicas alcanzó los 53.053 millones de euros, lo que supone un aumento del 4,7 % sobre 2018.

Es el máximo incremento tras los aumentos iniciados en 2015, después de los descensos significativos producidos entre 2011 y 2013 y la posterior estabilización en 2014, “situándose ya en cantidades próximas a los máximos alcanzados al inicio de la década analizada”.

El gasto público destinado a educación en relación al PIB se sitúa en 4,26 % en 2019 (4,21 % en 2018), un indicador que durante la última década registra un significativo descenso hasta 2014, influido por la importante disminución de la inversión.

La mayor parte del desembolso corresponde a nóminas: representa el 59,2 %, que se eleva al 67,5 % si se incluye el cálculo de las cotizaciones sociales.

Por otro lado, en 2018 el gasto medio por alumno es de 6.246 euros, lo que supone un 24,2 % del PIB por habitante. En Educación Infantil es de 5.069 euros; en Primaria se sitúa en 5.268 euros; en Secundaria suma 6.492 euros, y en Enseñanza Superior es de 8.669 euros por alumno.

"A pesar de haberse incrementado el gasto por alumno en 2018 un 13 % respecto al gasto de 2014, todavía continúa siendo un 3 % inferior al del año 2008 y un 4,6 % al del año 2009, cuando se alcanzó el gasto por alumno más alto", explica la estadística oficial.

En términos de PIB por habitante, para el total de las etapas, en el conjunto de la década ha existido una disminución en ese período pasando del 26,7 % en 2008 al 24,2 % en 2018, aunque el máximo se alcanzó en 2009 con 28,4 %.