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Turismo rural

Apicultor por un día en La Alcarria conquense

  • Una actividad de ocio alternativo que ofrece la empresa alcarreña “Miel Pósito Real”
  • Su objetivo es concienciar sobre la importancia de las abejas, las grandes polinizadoras

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Apicultor por un día

Cada vez son más los viajeros que conjugan sus vacaciones en la España rural con actividades de turismo activo y experiencias alternativas. Es el caso del proyecto "Apicultor por un día". Una iniciativa de la empresa "Miel Pósito Real" en la localidad conquense de Huete. Su objetivo no es otro que acercar a todo tipo de público a esta profesión, una de las más antiguas que perduran a día de hoy.

La vida entre colmenas

Manipular la colmena, coger los cuadros, ver los diferentes tipos de abejas que hay

Marina Isabel Olarte, vecina de Huete, se introdujo en el mundo de la apicultura en el año 2013. En su corta pero intensa trayectoria ha instalado 450 colmenas y ha creado su propia marca de miel, polen y jalea. Ahora, ocho años después, también organiza esta actividad agroturística que consifue enriquecer las visitas de los viajeros a la España rural.

El día a día de un apicultor

Marina Isabel Olarte prepara el ahumador RTVE CASTILLA-LA MANCHA

“Creemos que es una experiencia que a la gente le suele gustar mucho. Venir al campo, ponerse el traje, manipular un poco la colmena, coger los cuadros, ver los diferentes tipos de abejas que hay”. Son solo algunas de las tareas que comparte con los visitantes, nos explica Marina.

Para todos los públicos

La apicultura es un gremio bien conocido en La Alcarria conquense pero para los turistas supone todo un descubrimiento. Así nos lo cuenta Fernando, que participa en la excursión con sus dos hijas: “es una forma más de disfrutar de la naturaleza y de que, tanto adultos como niños, nos demos cuenta de la importancia que tienen las abejas. Nadie nace enseñado y hasta que no ves y experimentas una cosa, no te das cuenta de su valor”.

Una forma más de disfrutar de la naturaleza

Excursiones de colegios, familias, parejas... El público es de lo más variado. Eso sí, en el último año los grupos se han reducido a máximo 9 personas. Además, Marina dice haber implantado todo tipo de medidas de seguridad ante el coronavirus: “desinfectamos guantes y trajes. La cata de miel es totalmente individual”.

Las abejas, protagonistas de la experiencia

Tan relevante es conocer el producto, la forma de cosecharlo y de elaborarlo, como la importancia que tiene la apicultura y las abejas para el ecosistema. El 35% de la producción agrícola mundial depende de estos polinizadores. De ahí que uno de los objetivos sea que los visitantes se conciencien y respeten a estos pequeños insectos.

El trabajo del apicultor

Un visitante sostiene uno de los cuadros con abejas RTVE CASTILLA-LA MANCHA

Nuestro objetivo es que la gente se conciencie sobre la importancia del trabajo de las abejas

“Nuestra idea principal es que la gente se vaya concienciada de lo que es la apicultura y, sobre todo, el trabajo de las abejas que son los grandes polinizadores y se están encontrando con muchos problemas externos como los neonicotinoides”, explica Marina.

Auge del agroturismo

La actividad “apicultor por un día” está siendo todo un éxito. Son muchos los visitantes que, una vez conocida esta alternativa turística, buscan casa rural por los alrededores y no al revés. Y es que alojarse en la España Vaciada supone un contacto directo con la naturaleza, pero vivir estas experiencias enriquece la estancia y sorprende a pequeños y mayores.

De ahí el auge del agroturismo. Una tendencia al alza que ha hecho que en los últimos años encontremos actividades tan variadas como ordeñar a vacas, pasear en burro, esquilar ovejas, cuidar el huerto, hacer vino o sidra, surcar los mares con pescadores o, por supuesto, convertirnos en apicultores por un día.