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Coronavirus

¿Qué pasa con la Presidencia si la salud de Trump empeora por el coronavirus?

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El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, con mascarilla.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, con mascarilla.

El anuncio de que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha dado positivo en la prueba de coronavirus y las informaciones contradictorias sobre su salud ha abierto la incógnita de qué pasaría si su estado empeora y queda incapacitado para gobernar. Según la Constitución del país, se aplicaría la enmienda 25, por la cual, sería sustituido por el vicepresidente Mike Pence.

Creada tras el asesinato del presidente John F. Kennedy en 1963 y en medio de la Guerra Fría, esa enmienda fue diseñada para abordar las brechas constitucionales existentes sobre la sucesión presidencial en este tipo de casos. En concreto, fue presentada para proteger al Gobierno en supuestos como enfermedad repentina del mandatario.

El texto establece que, "en caso de destitución del presidente de su cargo, de su muerte o renuncia, el vicepresidente asumirá la Presidencia" tan pronto como el mandatario se lo transmita por escrito al liderazgo del Senado y de la Cámara Baja.

El vicepresidente Mike Pence sustituiría a Trump

La situación puede revertirse si el presidente vuelve a comunicar por escrito que puede ejercer las labores del cargo, con lo que volvería a asumir sus prerrogativas. Pero, ¿qué ocurre si el presidente no comunica que está incapacitado para gobernar? La sección IV de la Enmienda responde: el vicepresidente y la mayoría del Gobierno informan a las cámaras de que el presidente no puede cumplir con su tarea, y el vicepresidente asumiría el cargo de inmediato como mandatario en funciones. En este caso, por tanto, sería el vicepresidente Mike Pence, de 61 años, el encargado de sustituir a Trump.

En este supuesto, el presidente reanudaría sus obligaciones comunicando por escrito que no "existe ninguna incapacidad". La sección IV arroja aún más luz si el mandatario disputa que esté incapacitado para gobernar. En este supuesto, el vicepresidente y la mayoría del Gabinete pueden declararlo inhabilitado y deben hacerlo por escrito en cuatro días. Entonces el Congreso debe reunirse en 48 horas y tiene 21 días para decir sobre el asunto.

Sería la tercera vez que se sustituye a un presidente

Se necesitan dos tercios de ambas cámaras para declarar a un mandatario incapacitado para cumplir con sus obligaciones, o de lo contrario el mandatario permanecerá en el puesto. Si lo trasladamos a la situación actual, en el caso de que vicepresidente Pence tampoco pudiera ejercer, sería la líder demócrata de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, la que asumiría el cargo.

Según la emisora de radio NPR, la sección III ha sido invocada en tres ocasiones en el pasado. Una de ellas cuando el presidente Ronald Reagan se sometió a una operación por un cáncer en 1985 y su vicepresidente, George H.W. Bush, asumió la Presidencia temporalmente, aunque Reagan sostuvo que los redactores de la enmienda no tenían la intención de que se aplicara en tal circunstancia. Las otras dos fueron invocadas por George W. Bush, en 2002 y 2007, cuando le fueron practicadas unas colonoscopias.