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Kavanaugh, contra las cuerdas después de que dos mujeres más le acusen de abuso sexual

  • Trump abre la puerta a retirar la candidatura de Kavanaugh al Supremo si las agresiones se confirman
  • El juez reconoce que "a veces" bebía "demasiadas cervezas" pero niega los abusos

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Brett Kavanaugh, contra las cuerdas después de que dos mujeres más le acusen de abuso sexual
Brett Kavanaugh ante el Comité Judicial del Senado estadounidense el pasado 5 de septiembre.

El candidato del presidente Donald Trump al Tribunal Supremo de Estados Unidos, Brett Kavanaugh, intentará este jueves salvar su nominación a la corte, después de que otras dos mujeres le hayan acusado de abuso sexual en las últimas 24 horas. Donald Trump, hasta ahora férreo en el apoyo a Kavanaugh, ha manifestado la posibilidad de retirar su candidatura si descubre que es "culpable". Por su parte, el juez mantiene su inocencia aunque ha admitido que de joven "a veces" bebía "demasiadas cervezas".

En 1982 fui víctima de una de estas violaciones en grupo, o 'trenes', en la que Mark Judge y Brett Kavanaugh estaban presentes.

A pocas horas de que la primera mujer en denunciarle, Christine Blasey Ford, testifique ante los senadores para relatar la presunta agresión de Kavanaugh, una tercera ha entrado en escena asegurando ser testigo y víctima de abusos sexuales por parte del juez cuando era adolescente.

Ha sido el letrado de la presunta víctima, Julie Swetnick, quien ha dejado constancia de los episodios a través de Twitter: "Aproximadamente en 1982, fui víctima de una de estas violaciones en grupo, o 'trenes', en la que Mark Judge [amigo del juez] y Brett Kavanaugh estaban presentes", ha explicado Swetnick en una declaración jurada en la que ha evitado explicar si algunos de los participó directamente en la agresión.

Según el documento, las agresiones habrían tenido lugar entre 1981 y 1983 en fiestas a la que ambos asistían y en las que los hombres emborrachaban y drogaban a las mujeres para luego violarlas en grupo. Swetnick dice tener "un claro recuerdo" de estas fiestas en las que veía a "los chicos haciendo fila fuera de una habitación esperando a su turno" mientras una chica desorientada se encontraba dentro en una cama.

Paralela a esta acusación, saltaba la de una cuarta mujer que testificaba haber sido víctima del comportamiento de Kavanaugh que la habría empujado contra una pared de forma sexual al salir de un bar donde estaba bebiendo en 1998.

El apoyo de Trump se tambalea

El presidente estadounidense este miércoles insistía en la inocencia de su candidato al Supremo cuando aún no se conocía la cuarta acusación. "Todas esas acusaciones son falsas para mí", sentenciaba Trump al tiempo que cargaba en Twitter contra el letrado de Swetnick, que también defiende a Stormy Daniels, la actriz porno que se encuentra en una batalla legal contral el presidente: "Avenatti es un abogado de tercera que es bueno haciendo falsas acusaciones como hizo conmigo y como está haciendo ahora con el juez Brett Kavanaugh"

Sin embargo, el presidente se refirió por primera vez a retirar la candidatura de Kavanaugh si se descubriera que es "culpable" de los abusos sexuales. "Es posible que lo escuche y diga 'he cambiado de opinión' ", señaló.

A poco más de un mes de las elecciones legislativas, este caso es una prueba para Trump, que se arriesga a perder el voto de buena parte del electorado femenino.

La sombra de Anita Hill

Las denuncias contra Kavanaugh recuerdan al caso de Anita Hill, una joven abogada que en 1991 acusó de acoso sexual al juez Clarence Thomas justo antes de someterse a la votación en el Senado que decidiría sobre su nominación al Tribunal Supremo estadounidense.

Hace 27 años, la Cámara Alta tomó declaración tanto a Hill como a Thomas y finalmente se decantó por el juez que acabó ingresando en la corte.

El caso de Anita HIll sentó un precedente en 1991 contra el acoso sexual de las mujeres en el trabajo.

Anita Hill este miércoles dando un discurso en la Universidad de Utah. George Frey | AFP

La decisión provocó una oleada de indignación entre parte de la sociedad que hizo del I believe Anita Hill un lema contra el acoso sexual de las mujeres.

Un grupos de feministas negras llegó a comprar una página entera de publicidad en el prestigioso diario estadounidense The New York Times que cubrieron con 1.600 firman en apoyo a Hill y un titular: "Las mujeres afroamericanas nos defendemos". El caso de Anita Hill ayudó a destapar cientos de escándalos de abuso sexual en Estados Unidos y sentó un precedente que ahora planea sobre el caso de Kavanaugh.