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El equipo de Atapuerca buscará neandertales en la Cueva Fantasma

  • El año pasado halló en esta cueva un fragmento de parietal que podría ser neandertal
  • Si se confirma, completará la presencia de todos los homínidos en el yacimiento burgalés

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Cueva Fantasma es una sala kárstica de unos 30 metros de ancho, situada por encima de Gran Dolina.
Cueva Fantasma es una sala kárstica de unos 30 metros de ancho, situada por encima de Gran Dolina.

El equipo de Atapuerca comenzará este año la excavación sistemática desde los niveles superiores de Cueva Fantasma, donde en la campaña del verano pasado encontró un fragmento de parietal que, aún pendiente de los últimos estudios, puede corresponder a un neandertal.

Así lo ha anunciado uno de los codirectores, Eudald Carbonell, quien ha precisado que, de confirmarse, permitirá completar en Atapuerca la presencia de todas las especies de homínido desde hace más de un millón de años hasta la actualidad.

Se trata de una cavidad que ya estaba documentada, y en la que se llegó a encontrar un bifaz, una especie de cuchillo antiguo, pero llevaba años olvidada. En la pasada campaña, miembros del equipo de investigación de Atapuerca, limpiaron la cavidad que, con el paso del tiempo, había quedado cubierta por cascotes de la ladera donde se encuentra.

Situada por encima de Gran Dolina -donde se encontraron los primeros restos de Homo antecessor, una especie solo descrita hasta ahora en Atapuerca-, Cueva Fantasma es una sala kárstica de unos 30 metros de ancho.

"Posiblemente una de las cavidades con sedimentos más grandes de la Sierra de Atapuerca", según Eudald Carbonell, además de codirector del Proyecto Atapuerca, miembro del Institut Català de Paleoecologia Humana i Evolució Social (IPHES).

Excavaciones para "uno o dos siglos"

Carbonell insiste en que en Atapuerca queda trabajo para varias generaciones de científicos y solo en la Cueva Fantasma estima que se podrá trabajar durante uno o dos siglos.

En la campaña de excavaciones de este verano, una vez recuperado el ritmo de trabajo habitual tras la crisis económica, se realizarán labores en prácticamente todos los demás yacimientos de la sierra, declarada Patrimonio de la Humanidad.