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Barómetro CIS

El paro repunta como principal problema para los españoles una vez superada la inestabilidad política

  • Preocupa al 74,7% de los ciudadanos, dos puntos más que en noviembre
  • La corrupción y los asuntos económicos, los otros problemas que más preocupan

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Leones del edificio del Congreso de los Diputados
Los problemas políticos han cedido algo de protagonismo frente a la preocupación por el paro y la economía, según el CIS

El paro, que es de manera continuada la principal preocupación de los españoles, lo es un poco más actualmente una vez que se ha conseguido superar la inestabilidad política con la formación de un Gobierno tras un año de bloqueo institucional. Ese es el balance general que arroja el barómetro del mes de diciembre del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) [Barómetro del CIS de diciembre de 2016, en pdf].

En este estudio, elaborado del 1 al 11 de diciembre, el paro sigue situado como el principal problema de los españoles, ya que lo menciona como uno de los asuntos que más le preocupa el 74,7% de los consultados, 1,8 puntos más que en el barómetro de noviembre, una percepción inmune a los datos conocidos este mismo miércoles de que el paro en 2016 bajó en 390.534 personas, su mayor descenso anual de la historia.

Sube también la inquietud por los problemas de índole económica, citados por el 24,7%, ocho décimas más que el mes anterior y se colocan como la tercera preocupación, por detrás del paro y de la corrupción y el fraude, que menciona el 36,7%, seis décimas más que antes.

La inquietud por la política y los políticos, a la baja

De este modo, la percepción de los políticos como un problema y la mala percepción que mayoritariamente tienen los españoles de la situación política continúan a la baja. Así, la clase política, que en el barómetro de noviembre, tras la investidura de Mariano Rajoy, era citada como un problema por el 25,7% de los españoles, ha continuado esa tendencia bajando casi cuatro puntos, hasta el 22,1%.

Y más ha descendido aún, casi siete puntos, el porcentaje de los españoles que descalifican la situación política general del país, que han bajado del 74,3% en noviembre al 67,5% un mes después -en octubre, eran el 88,1%-.

En la lista de los principales problemas señalados por los ciudadanos, tras los citados del paro, la corrupción, la economía y los políticos, se situán la sanidad (13,7%), la educación (13,5%) y los de índole social (12,2%).

Y respecto a cómo se percibe que el país ha avanzado y avanzará, la mayoría de los encuestados, el 54,3%, cree que la situación política actual es igual que la de hace un año, el 12,3% considera que es mejor y el 29,5% la ve peor que entonces. Respecto al futuro, el 47% augura que dentro de un año será igual, el 21,6% cree que será peor y el 15,2% opina que será mejor.

En cuanto a la situación económica general, solo el 4,8% cree que es buena (4,7%) o muy buena (0,1%) frente al 50,4% que la ve mala (39,5%) o muy mala (20,9%). El 34,3% la considera regular. El 55,4% cree que ahora es igual que hace un año, el 18,9% opina que es mejor y el 23,9% que es peor. Dentro de un año, el 23,6% vaticina que será mejor, el 42,3% que se quedará igual y el 20% que empeorará.

Sin variación en el modelo territorial preferido

Como es habitual, el CIS ha preguntado también sobre la fórmula de organización territorial. Aumenta ligeramente, en cinco décimas porcentuales, el número de españoles que no quiere cambios en el modelo autonómico y prefiere un Estado en el que las comunidades tengan la misma autonomía (37,8%).

Apenas varía -una décima menos- el porcentaje de los que optan por un menor grado de autonomía para las regiones, que se sitúa en el 9,6%, mientras que sube ligeramente -en 1,1 puntos- el de los que se decantan por más autonomía, un 14,4% de los encuestados. Siguen descendiendo también los partidarios de un Estado centralizado sin autonomías, que pasan del 18,5% al 18%.

Por último, sólo un 9,7% de los entrevistados apuesta por un Estado en el que se reconociese a las comunidades autónomas la posibilidad de convertirse en Estados independientes, tres décimas porcentuales más que en noviembre.