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Cospedal avisa al PSOE de que no puede jugar con la unidad por los intereses propios

  • Preside en Toledo la reunión del Comité Regional de su partido
  • Pide "sentido de estado" y "generosidad" y dejar los "experimentos"

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Cospedal acusa a Sánchez de poner en peligro la unidad del país

La secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, ha advertido este domingo al PSOE de que no se puede jugar con la unidad nacional por un interés partidista o personal buscando la supervivencia y ha apelado a la unidad y al consenso para crear un gobierno estable.

"No vale, todo no vale", ha recalcado Cospedal en Toledo, donde preside la reunión del Comité Regional de su partido en Castilla-La Mancha y en la que ha pedido responsabilidad, consenso, sentido de Estado y generosidad al entender que ahora no es momento de "experimentos de laboratorio".

Ante el desafío soberanista, la dirigente popular ha llamado también a la "imprescindible alianza de la unidad" por ser la mayor fortaleza frente a quienes, como los independentistas catalanes, pretenden romper España.

Hay que ser "muy conscientes" de que -ha recalcado- en la defensa de la unidad del país "no puede haber equidistancias", que es lo que, a veces, parece que pretende el líder socialista, Pedro Sánchez, entre "aquellos que quieren dividir España y los que luchamos por mantener la unidad".

Críticas a la cesión de escaños

Se ha referido así a la decisión adoptada esta semana por el PSOE de ceder dos senadores a ERC y otros dos a DiL (la candidatura de Convergencia) para que puedan tener grupo propio en el Senado, una situación, ha recordado la secretaria general del PP, que han criticado "muchos destacados socialistas".

A su juicio, la mayoría de los socialistas "no están por esa labor y tienen muy claro" que no quieren la independencia de Cataluña.

"Sólo así, unidos, podemos ser gran país", ha dicho, y tener un Estado social y democrático de derecho que ha costado tanto conseguir.

Ha vuelto a tender la mano al PSOE y a Ciudadanos para promover un Ejecutivo estable, liderado por el PP, y les ha pedido "responsabilidad, sentido de Estado y generosidad", recordando que fue el PP el que ganó las elecciones, con más de siete millones de votos.

De Cospedal, en vísperas de que el Rey inicie las consultas con los distintos partidos para proponer un candidato a la Presidencia del Gobierno, ha insistido en que ahora hay una oportunidad para diseñar con ellos ese Ejecutivo sobre una serie de puntos básicos.

Puntos que, ha señalado, tienen que ver con la unidad nacional, el derecho a decidir "de todos los españoles", el imperio de la ley independientemente del lugar de residencia, y el papel que tiene que tener España en Europa.

Pactar como en el Congreso

De la misma manera que los tres partidos se pusieron de acuerdo en la composición de la Mesa del Congreso, De Cospedal ve posible llegar a un pacto de gobernabilidad, que permita, además de afrontar el desafío catalán, que se siga trabajando en el crecimiento económico y en la creación de empleo para "no tirar por la borda cuatro años de tanto esfuerzo".

Según la dirigente popular, eso es lo que quiere la "inmensa mayoría de los españoles" para garantizar la estabilidad lograda, que se puede ir "al traste enseguida", ha avisado.

Ha afirmado que aún queda mucho por hacer y que el futuro del país "será más o menos exitoso" si todos son capaces de dialogar y buscar lo que les une en lugar de "acrecentar" lo que les separa.

No es el momento de experimentar ni de convertir el Congreso y el Senado "en un zoco de sillones" sino de tener altura de miras y sentido de Estado.

Por tanto, en estas semanas cruciales para la formación de Gobierno, De Cospedal ha llamado a los otros dos partidos de la oposición a promover un Ejecutivo "estable y serio" para no malograr un proyecto que ha permitido salir a España de la crisis y que ha sido "el asombro" de los vecinos europeos.

Como presidenta del PP de Castilla-La Mancha, ha señalado que la comunidad afronta un momento "especial" al gobernar un partido de "perdedores", refiriéndose a la Presidencia del socialista Emiliano García Page que apoya Podemos, un Ejecutivo que "tiene difícil sacar adelante sus compromisos".