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Día del placer del espectador en San Sebastián

  • Catarsis colectiva con los Relatos salvajes producidos por Almodóvar
  • Magical Girl, de Carlos Vermut, perturba y sorprende en la sección oficial

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Catarsis colectiva en San Sebastián con los "Relatos salvajes" producidos por Almodóvar

9 NOMINACIONES A LOS GOYA

Mejor película

Mejor director : Damián Szifrón

Mejor actor : Ricardo Darín

Mejor guión original: Damián Szifrón

Mejor montaje: Pablo Barbieri, Damián Szifrón

Mejor película iberoamericana: Damián Szifrón

Mejor música original: Gustavo Santaolalla

Mejor dirección de producción: Esther García

Mejor Maquillaje y peluquería: Marisa Amenta, Néstor Burgos

FICHA TÉCNICA

Título original: 'Relatos salvajes'

Año: 2014

Duración: 115 min.

País: Argentina

Director: Damián Szifrón

Guión: Damián Szifrón

Reparto: Ricardo Darín, Darío Grandinetti, Leonardo Sbaraglia, Érica Rivas, Oscar Martínez, Rita Cortese, Julieta Zylberberg, Osmar Núñez, Nancy Dupláa, Germán de Silva, María Marull, Marcelo Pozzi, Diego Gentile, María Onetto

Una competición de carisma. La rueda de prensa de Relatos salvajes, la película más divertida del festival (o la película del festival a secas) reunía a su director, el argentino Damián Szifron, dos de sus protagonistas, Ricardo Darín y Leonardo Sbaraglia, y dos de sus productores, los hermanos Pedro y Agustín Almodóvar. Mucho talento condensado para una audiencia entregada a una película gamberra, lucida, reveladora y casi subversiva que participa en la sección Perlas. Participada por TVE, se estrena en España en 17 de octubre tras su enorme éxito en Argentina.

“Es terrible tener en la mesa dos directores”, ha bromeado Pedro Almodóvar que, junto a Darín, casi ejercía de moderador de las respuestas. Relatos Salvajes es una película de seis capítulos diferentes con un denominador común: el momento de liberación (violenta) ante las frustraciones de la sociedad, burocracia, familia o matrimonio. Una película catártica que Szifron, director de cine y creador de series de televisión, imaginó inspirándose en la serie Cuentos asombrosos.

Los hermanos Almodóvar a través de su productora El Deseo perseguían el director argentino desde que vieron Tiempo de valientes (2005). “Me gustan los estallidos de cólera , el teatro y la vida están llenos de catarsis. Es insólito que te llegue un guion tan bueno”, afirma Pedro Almodóvar.

“Habla de enfados y provoca una liberación en el espectador. No es una película que está a favor de nos tomemos la justicia de nuestra parte. Son enfados cotidianos tomados de situaciones reconocibles que uno ha soñado. Yo no conduzco, pero me identifico con la rabia del personaje de Ricardo (Darín) al que ponen multas”, dice Almodóvar, que celebraba 35 años en el Festival de San Sebastián desde que acudiera por primera vez con Pepi, Lucy, Boom y otras chicas del montón.

Además del éxito argentino, Relatos salvajes ya ha sido aclamada en los pases de los festivales de Cannes y Toronto. Aunque nacida en Argentina, su conexión es universal. Las salas sencillamente rompen a aplaudir en mitad de las proyecciones. “Damián, tienes que hacer una película sobre nosotros. Somos un país que usa muchos eufemismos, sobre todo la clase dirigente. Estamos profundamente desesperados con una mezcla de las más absoluta depresión”, ha proclamado antes de criticar la actuación del Gobierno en la Ley del aborto acusándole de electoralista.

Ricardo Darín resume la experiencia de visionar Relatos salvajes como “participar de forma activa” como los “niños en los dibujos animados”. “Los adultos no solemos mostrar nuestras emociones”, afirma el actor.

Un poco eclipsado por la arrolladora presencia de Pedro Almodóvar, Szifron, simpático y elocuente, tuvo, al fin, la oportunidad de definir la película. “La solemnidad es la enemiga, hay algo sospechosa en ella. Parece que en el arte siempre hay que quitársela de encima. La película recorre personajes humillados, pero el verdadero tema es lo que sucede después: el deseo, el placer que produce responder a la agresión”.

‘Magical girl’: la película española del año

Nada mejor para demostrar que la sombra de Almodóvar es alargada que la definición que Carlos Vermut hace de él: “Es un maestro, un sensei”. Vermut irrumpe en el festival con Magical Girl, una película que se abre paso como un rompehielos en la sección oficial. La mejor película que opta a la Concha de Oro; la película española del año.

Tras su prometedor debut (Diamond Flash) distribuido en los portales de vídeo de internet, Vermut ha rodado su nuevo guión bajo el paraguas de una productora y con José Sacristán, Bárbarla Lennie y Luis Bermejo en el reparto. “Diamond Flash la hice con mi dinero porque quería hacer una película. Trabajar con una mayor producción me ha permitido no estar pendiente del catering y los bocatas, sino de la dirección de actores”, apunta Vermut.

José Sacristán, auténtica ‘musa’ para una nueva hornada de cineastas, es un profesor con un pasado oscuro en un personaje que lleva todavía un paso más allá su papel de sicario en El muerto y ser feliz. “Es un pobre diablo que se ve obligado por las circunstancias a utilizar métodos terribles”, dice el actor. “No puedo sino celebrar que estos jóvenes con talento y amor al cine me llamen. No solo por su calidad y por trabajar con la que está cayendo, sino peor estar en esta peripecia tan interesante. En mi caso, que pasado mañana cumplo 77 años, es rejuvenecedora”.

Con una estructura en puzle y su facilidad para generar interés escamoteando datos casi hasta lo insostenible, Magical Girl ha perturbado y sorprendido en los primeros pases. “Me gusta poner al espectador en un punto en el que se ríe situaciones abominables” dice Vermut.

Por sabiduría narrativa y originalidad, Magical girl se coloca junto a La isla mínima, Eden y Silent heart, como favorita para la Concha de Oro.