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El Estado empieza la subasta de Catalunya Banc, que pretende adjudicar antes del verano

  • El FROB ha puesto 3.000 millones para recapitalizar la antigua caja
  • La entidad aún tiene que reunir más capital por sus inversiones inmobiliarias

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El Fondo de Reestructuración Ordenado Bancario (FROB) ha aprobado iniciar el proceso para subastar Catalunya Banc con el fin de que la antigua caja deje antes del verano de estar controlada por el Estado, que ha puesto en ella casi 3.000 millones de euros.

En concreto, la comisión rectora del FROB ha informado este jueves de que el Estado venderá el 89,74 % que posee en Catalunya Banc y el 10,26 % del banco que aún controlaba CatalunyaCaixa. El Estado se hizo con ese porcentaje en junio de 2011, cuando tuvo que inyectar 1.718 millones para que cumpliera con los nuevos requisitos de capital impuestos por la crisis que atravesaba el conjunto del sector, fundamentalmente por sus malas inversiones en el negocio inmboliario, agravado por la crisis económica en la zona euro.

La entidad es la resultante de la fusión en 2009 de Caixa Catalunya, Tarragona y Manresa, que se realizó ya entonces con un préstamo de 1.250 millones de la primera versión del FROB.

Catalunya Banc perdió 1.335 millones de euros en 2011, después de adelantar 1.505 millones para sanear una parte de sus activos inmobiliarios problemáticos. Pero le quedan por sanear aún 1.595 millones de euros, la mayoría por la misma causa, además de que tiene que reforzar su capital en 1.053 millones.

Aún así, la entidad presumió recientemente de que hay varios compradores interesados en ella y en el sector citan al Banco Santander y al BBVA, pero también a Bankia, Banco de Sabadell o KutxaBank, que este jueves ha dicho que estudiará la operación, para la que el FROB está abierto a otorgar nuevas ayudas o garantías (en un comunicado habla de "apoyos financieros").

Catalunya Banc cuenta con 7.184 empleados y 1.164 sucursales, con una fuerte presencia en Cataluña, informa Efe.

Además, el organismo dependiente del Banco de España ha explicado en un comunicado que en paralelo ha avanzado en la subasta del Banco de Valencia, que intervino en noviembre pasado, y que ha comenzado los contactos con los potenciales interesados.