Enlaces accesibilidad

El pánico a las escuchas llega a EE.UU.: ¿Hubo pinchazos a las víctimas del 11S?

  • El imperio de Murdoch incluye en EE.UU. Fox News y The New York Post
  • De momento no está prevista ninguna investigación formal

Por

Jay Rockefeller, senador demócrata de Virginia Occidental, ha expresado su preocupación porque el espionaje periodístico en  Londres, admitido por News Corporation, "pudo haberse extendido a víctimas" de los atentados de 2001 "o a otros estadounidenses".

Por ello, el influyente político estadounidense ha pedido a través de un comunicado publicado este miércoles que se abra una investigación para saber si la empresa periodística News Corporation ha realizado espionaje u otras actividades ilegales en Estados Unidos.

Rockefeller ha manifestado que las acusaciones contra el diario británico News of the World, propiedad de News Corporation, levantan graves interrogantes sobre si la compañía ha violado o no alguna ley estadounidense, "y aliento", ha apuntado, "a las debidas agencias a que investiguen para cerciorarse de que no se ha violado la vida privada de estadounidenses".

El imperio en EE.UU.

"De ser así, las consecuencias serán serias", ha amenazado Rockefeller en la nota, publicada en la página web del Comité de Comercio, Ciencia y Transporte del Senado de EE.UU., que él preside.

Por ahora, la Comisión Federal de Comunicaciones de EE.UU. (FCC, en inglés) ha dicho que no tiene previsto lanzar una investigación, pero en el Congreso aumentan las presiones en ese sentido.

El imperio mediático de Rupert Murdoch incluye en EE.UU. la cadena televisiva Fox News, de corte conservador, y el diario The New York Post.

El pasado lunes, el grupo cívico "Ciudadanos por la Responsabilidad y la Etica" presionaba a Rockefeller en una misiva para que se investiguen las actividades de News Corppration en EEUU, a raíz de informes en la prensa británica de presunto espionaje de víctimas de los atentados del 11 de septiembre de 2001.

Impacto generalizado

El espionaje periodístico ha desatado un escándalo mayúsculo en el Reino Unido, tras las revelaciones de que las escuchas estuvieron también dirigidas contra personalidades de la talla de la reina Isabel y el exprimer ministro británico Gordon Brown.

La seguridad de Isabel II y su esposo, el príncipe Felipe, pudo verse comprometida debido a que dos policías encargados de proteger a la familia real británica vendieron datos personales a reporteros del dominical sensacionalista News of the World, según informó el lunes el periódico The Guardian en su página web.

Una agenda telefónica de la familia real habría sido vendida por esos guardias de seguridad al dominical por mil libras (1.135 euros).

Lo sucedido fue descubierto en 2007 en una investigación interna del grupo News International (NI) de Rupert Murdoch, propietario del tabloide, aunque no fue hasta junio pasado cuando esa información fue transmitida a la policía.

El asunto ha ido a parar al parlamento británico, que ha convocado a Murdoch, a su hijo, James, y la exdirectora del News of the World, Rebekah Brooks, a audiencias para el próximo 19 de julio.