Enlaces accesibilidad

La clonación del mamut, cada vez más cerca

Por

Ciencia al cubo

El nacimiento de perritos fluorescentes, la muerte de una chimpancé calva, qué son las neuronas espejo, el origen de los ojos azules o por qué nos salen canas. De la mano de América Valenzuela, en 'Ciencia al Cubo' pueden escuchar las historias más variopintas sobre temas científicos de actualidad. Emisión en Radio 5: Lunes a jueves a las 15: 42; Sábados 09:22 / 17:52 / 21:06; Domingos 09:22 / 17:55

Akira Iritani, científico de la Universidad de Tokio, anunció hace una década su intención de clonar un mamut, uno de esos elefantes prehistóricos de colmillos larguísimos y retorcidos.

Pero se encontró con dificultades técnicas que ahora ha solventado y vuelve a la carga. Parece que cada vez está más cerca la visión de un mamut correteando por las praderas en pleno siglo XXI.

Hay varias clases de mamut. El que clonaría Iritani es uno de los más conocidos, el mamut lanudo, el Mammuthus primigenius, un animal perfectísimamente preparado para afrontar el frío de la época glaciar en la que vivió, el Pleistoceno, hace unos 400.000 años.

En ese entonces, el hielo cubría más de una cuarta parte de la superficie terrestre. El mamut poblaba las regiones septentrionales de Eurasia y América, que es donde estaban situados los dos grandes sistemas glaciales.

Este mamut tenía un pelaje denso, lanoso y largo y orejas pequeñas. Y los colmillos también largos le servían, además de para luchar, para buscar comida bajo la nieve.

Clonación de restos congelados

Para clonar al animal prehistórico, los científicos japoneses extraerán núcleos de células de piel o músculo del mamut de Yukagir, un ejemplar que se halló congelado en 2003.

Lo encontraron unos cazadores de renos en Siberia, es un mamut adulto y murió hace 18.000 años. Esos núcleos se insertarían en óvulos de una hembra de elefante indio, que también haría las veces de madre de alquiler.

Hasta este momento el proceso no se ha desarrollado con éxito porque los núcleos estaban demasiado dañados una vez descongelados. Pero parece que las cosas han cambiado.

La novedad es que, según ha anunciado el mismo Iritani, han solventado este problema de los núcleos en mal estado gracias a nuevas tecnologías desarrolladas en el Centro Riken de Biología del desarrollo en Kobe, en Japón.

Experiencia basada en ratones

Han probado a clonar un ratón siguiendo el proceso que hemos descrito antes con núcleos de células de otro ratón que llevaban congelados 16 años. Y han nacido ratoncitos sanos.

Calculan así que en dos años podrán aplicar la técnica a los núcleos de células de mamut. Luego habrá que esperar para saber si la gestación del elefante ha salido bien.

Dura dos años; es mucho más larga que la de los humanos. Y así veremos sin finalmente, tras tanto anuncio y todo hay que decirlo, muchísimo escepticismo entre los demás expertos, somos testigos de la resurrección del mamut lanudo.

CIENCIA AL CUBO

SUSCRÍBETE al podcast de Ciencia al Cubo, el programa sobre Ciencia de América Valenzuela en Radio 5.