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El español fallecido viajaba en el avión siniestrado para ver a la virgen de la que era devoto

  • Manuel González Asensio, extremeño de 51 años, regresaba de Santiago
  • Allí había visitado el Santuario de la Virgen de la Caridad del Cobre
  • Se encontraba con unos amigos de vacaciones en la isla

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Manuel González Asensio, el extremeño que viajaba en el avión siniestrado este jueves en Cuba, estaba de vacaciones en este país, en el que ha encontrado la muerte al regreso de un viaje a Santiago de Cuba para conocer el Santuario de la Virgen de la Caridad del Cobre, de la que era devoto.

Manuel era soltero, tenía 51 años y era natural de Badajoz, aunque en la actualidad vivía en Madrid por motivos profesionales, trabajando en el sector de la hostelería, ha informado su sobrino David de la Era González.

Según ha explicado, era la primera vez que su tío viajaba al país caribeño, y lo había hecho en compañía de unos amigos, que decidieron quedarse en La Habana y no realizar la excursión que Manuel hizo a Santiago de Cuba para conocer a la Caridad del Cobre, patrona de la isla.

A su regreso, el avión en el que viajaba, de la compañía Aerocaribbean, se estrelló en un paraje de la provincia central de Sancti Spíritus y ninguno de sus 68 ocupantes -28 de ellos extranjeros- ha sobrevivido.

Su sobrino ha pedido tanto al Ministerio de Asuntos Exteriores como a la Delegación del Gobierno en Extremadura que agilicen los trámites porque, según ha criticado, hasta el momento sólo han recibido información por los medios de comunicación.

"Queremos que nos aclaren lo sucedido", ha añadido, lamentando también que todavía no se les ha comunicado si algún familiar tendrá que desplazarse a la zona ni las previsiones que hay en cuanto a la repatriación del cuerpo.

Pésame de Zapatero

Mientras, el jefe del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha enviado este viernes al presidente de Cuba, Raúl Castro, un telegrama de pésame por el accidente aéreo ocurrido en el país caribeño en el que han muerto las 68 personas que iban a bordo.

Zapatero expresa a Castro la solidaridad del pueblo español por la "inmensa tragedia" y le ofrece "la total disposición para aportar cuanta ayuda pueda resultar necesaria".

"Tenga la seguridad de que en estos momentos de profundo dolor, puede contar con todo el afecto del Gobierno y del pueblo español, que le ruego transmita a las familias de las víctimas", señala Zapatero en su telegrama.