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Obama crea una comisión de investigación mientras la marea negra sigue avanzando

  • Su primer objetivo será descubrir la causa del vertido

   Obama ha reiterado que su Gobierno "hará rendir cuentas" por el desastre a BP

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VERTIDO DE CRUDO EN GOLFO DE MÉXICO
Vista del vertido de crudo en el Golfo de México.

El presidente estadounidense, Barack Obama, ha anunciado la creación de una comisión de investigación para investigar el vertido de petróleo en el Golfo de México y evitar futuras catástrofes mientras la marea negra y la frustración sigue avanzando.

En su discurso de todos los sábado Obama ha reiteradoque su Gobierno "hará rendir cuentas" por el desastre a British Petroleum a las otras empresas envueltas en las operaciones de la plataforma -Hailliburton y Transocean Ltd- para que paren el vertido, reparen el daño ocasionado e indemnicen a las personas que han sufrido perjuicios.

Obama ha señalado en su mensaje que "la relación demasiado amistosa" entre las compañías energéticas y las agencias que las regulan ha sido motivo de inquietud desde hace tiempo.

El ex senador demócrata Bob Graham encabezará esta comisión que será presidida también por William Reilly, quien fue director de la Agencia de Protección Ambiental con una administración republicana, y que junto con otros cinco miembros que nombrará Obama la próxima semana -entre los que habrá científicos e ingenieros- tendrán que preparar un informe en seis meses.

Objetivo: Descubrir las causas del vertido

Su primer objetivo será descubrir la causa del vertido, iniciado cuando una explosión destruyó una plataforma petrolera de BP el pasado 20 de abril. Además, presentará una serie de opciones para aumentar la seguridad y la protección ambiental en las explotaciones marítimas.

Un mes después de la explosión de la plataforma petrolera "Deepwater Horizon", operada por BP en el Golfo de México, a 77 kilómetros de la costa del estado de Luisiana, causara lamuerte de 11 trabajadoresel derrame no ha sido aún controlado comenzó a llegar esta semana a las marismas del delta del Misisipi.

La Administración Nacional de Océanos y Atmósfera de EE.UU. advirtió de que "una pequeña porción" de la mancha entró en la corriente principal marina y se teme que el vertido se desplace hacia Florida e incluso más al sur, a Cuba.

BP no consigue sellar la fuga

Todavía se desconocen cuáles serán las consecuencias del derrame para el ecosistema y la magnitud de la tragedia, mientras British Petroleum no consigue sellar la fuga.

En un principio la compañía tenía previsto realizar este domingo otro intento para frenar el escape, sin embargo, el viernes anunció que las operaciones se retrasarán hasta la semana que viene, probablemente hasta el martes, según informó el director de operaciones de BP, Doug Suttles.

La operación consistirá en introducir líquidos pesados y después de lodo y cemento que al endurecerse podría taponar el derrame.

Impacto medioambiental

Oceanógrafos, veterinarios expertos en la vida marina y responsables del Servicio de Pesca y Vida Silvestre (FWS) de EE.UU. han advertido de consecuencias "sin precedentes" del derrame en el ecosistema en el área.

Esta agencia se está preparando para el potencial impacto del derrame en 25 refugios silvestres a lo largo de las costas de Luisiana, Misisipi, Alabama y Florida, donde viven docenas de especies en riesgo y en peligro de extinción, y ha desplegado más de 200 trabajadores para minimizar el impacto del vertido.

La presión y las críticas del Gobierno y de la sociedad civil ha obligado esta semana a la empresa a transmitir en directo, en su web y a través de una cámara submarina, el petróleo que se fuga del pozo.

BP pondrá otra caja sobre la fuga

Además, en el Congreso de EE.UU. se celebraron varias audiencias para aclarar y definir los esfuerzos de limpieza del derrame.

Acusan al Gobierno de ser demasiado permisivo con BP

El derrame ha cuestionado la anterior propuesta de Obama para expandir la perforación en alta mar como parte de la estrategia para ganar el apoyo republicano a la legislación del cambio climático.

Pero según ha asegurado en su discurso "sólo podemos realizar perforaciones petroleras en mar abierto si tenemos la seguridad de que un desastre como este derrame no volverá a ocurrir".

Científicos y oceanógrafos han acusado al Gobierno de haber sido demasiado permisivo con BP y de no haber exigido un análisis de cuántos barriles de petróleo entran cada día en las aguas del Golfo a través de la fuga.

La petrolera ha dicho que se trata de 5.000 barriles diarios, cifra que maneja también el Gobierno, mientras que otros cálculos apuntan a entre 25.000 y 95.000 barriles diarios.