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Tres muertos, un adulto y dos niños, en el ataque a una guardería en Bélgica

  • Los hechos han ocurrido en un centro infantil situado a 30 km de Bruselas
  • El agresor apuñaló indiscriminadamente a los niños que estaban en la sala de bebés
  • Hay también otros diez heridos, todos niños y dos de ellos en estado grave
  • El presunto agresor, que en un principio se dio a la fuga, fue detenido
  • Llevaba la cara pintada a rayas negras y blancas cuando entró en el edificio

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En Bélgica, un hombre ha entrado en una guardería y ha matado a puñaladas a dos niños y a una mujer

Tres personas han muerto apuñaladas, dos de ellas niños, en una guardería de la ciudad belga de Dendermonde, por un hombre que posteriormente fue detenido por la policía. Las autoridades han confirmado que el número de muertos son tres y no cuatro como se había informado erróneamente.

El autor del ataque entró en torno de las 9.30 GMT en la guardería, avanzó en seguida hacia el departamento de los bebés, donde sacó un cuchillo y comenzó a apuñalar indiscriminadamente, según ha explicado en una rueda de prensa el fiscal de Dendermonde, Christian Du Four.

Según una información no confirmada, una cuidadora huyó hacia una puerta trasera con dos niños en brazos y el intruso les persiguió e hirió de muerte.

Además de las víctimas mortales, diez niños resultaron heridos  y dos de ellos en estado grave. Los niños heridos fueron hospitalizados en diferentes clínicas, por lo que se formó una base de datos con las fotos de ellos, para que sus padres les puedan localizar fácilmente.

El agresor, de 20 años de edad y residente en Dendermonde, entró en la mañana del viernes en un centro infantil con la cara pintada de blanco y los ojos de negro y cruzó dos puertas sin que nadie se percatase de su presencia hasta alcanzar una estancia en el primer piso donde se encontraban los pequeños.

Armado con un cuchillo de 30 centímetros comenzó a apuñalar de manera indiscriminada para luego darse a la fuga en una bicicleta y ser detenido más tarde en un supermercado de un pueblo vecino.

Durante la detención, el hombre resultó herido y tuvo que ser ingresado en un hospital de la cercana ciudad de Aalst.

No obstante, la Policía pudo comenzar después el interrogatorio, con objeto de averiguar los motivos de su actuación, aunque fuentes cercanas a la investigación han confirmado que se ríe de los agentes.

No estaba bajo los efectos del alcohol ni las drogas

El fiscal Christian du Four ha desmentido en declaraciones a la radiotelevisión pública RTBF que el individuo se encontrase bajo los efectos del alcohol o de sustancias estupefacientes ni que opusiese resistencia en el momento de la detención, aunque sí llevaba un arma consigo.

Du Four negó que el agresor se hubiese escapado de una institución psiquiátrica y que tuviese antecedentes penales e indicó que la fiscalía emitirá mandato de arresto por asesinato e intento de asesinato.

El concejal de asuntos sociales de Dendermonde, Theo Janssens, que llegó al lugar de los hechos a la vez que los servicios de emergencias, describió la situación como "catastrófica".

Las autoridades belgas han puesto en marcha un centro de crisis para ofrecer información y asistencia a familiares de los niños de la guardería y tienen previsto ofrecer nuevos detalles mañana.

En total, 18 niños y seis miembros del personal estaban presentes en el momento de los hechos.

Las primeras informaciones sobre la tragedia generaron momentos de gran tensión en la guardería, a donde acudieron aterrorizados padres para intentar averiguar si sus hijos estaban heridos.

Bélgica, conmocionada

"El país está escandalizado y de luto por este acto abominable de violencia", ha dicho el primer ministro, Herman Van Rompuy, en un comunicado en el que expresa su compasión a los padres y a las familias de todas las víctimas.

Desde el primer momento, las autoridades se esforzaron por que las víctimas recibieran la ayuda médica necesaria y que fueran atendidas por psicólogos, tanto sus familiares como las personas que no resultaron heridas.

Asimismo, se puso en marcha un centro de crisis para organizar la asistencia y facilitar información a los familiares.

El príncipe Felipe y la princesa Matilde tenían previsto visitar este viernes mismo a las víctimas que no están hospitalizadas y a sus familiares.

La ministra de Salud, Veerle Heeren, se mostró satisfecha por la manera en que se organizó la ayuda, pero pidió una investigación a fondo para averiguar cómo pudo entrar el agresor en la guardería.

"Después tendremos que analizar si debemos adoptar nuevas medidas de seguridad al reglamento sobre las guarderías", explicó Heeren, que advirtió, no obstante, de que éstas "ya son muy severas, y no podemos convertir una guardería en una prisión".

Según las descripciones de los testigos, el autor fue un hombre con la cara pintada a rayas blancas y negras.