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Brasil llama a consultas a su embajador en Ecuador por una deuda en disputa

  • El Gobierno ecuatoriano somete a arbitraje una deuda contraída con Brasil
  • Rafael Correa creó una comisión que revisa la deuda externa del país

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El Gobierno de Brasil ha llamado a consultas a su embajador en Ecuador tras la decisión del Ejecutivo de Rafael Correa de someter a un arbitraje una deuda con el principal banco del Estado brasileño, anunció hoy el Ministerio de Relaciones Exteriores.

"El ministro Celso Amorim llamó al embajador de Brasil (Antonino Marques Porto) en Ecuador para consultas", anunció la Cancillería en un comunicado oficial.

Todo comenzó cuando el Fiscal General de Ecuador, Washington Pesántez, inició una investigación para determinar si hubo ilegitimidad en algunos tramos de la deuda externa del país, con la sombra de sospecha sobre varios ex presidentes.

"Se inició una indagación, hay cosas gravísimas que investigar, el informe habla de responsabilidades penales", dijo Pesántez a periodistas y precisó que esa investigación estará liderada por una "comisión interinstitucional de economistas y abogados".

Brasil revisará su cooperación con Ecuador

Según el canciller, esta decisión de Ecuador llevará a Brasil a examinar la cooperación con esa nación.

"El Gobierno brasileño recibió con mucha preocupación la noticia de la decisión del Gobierno ecuatoriano de iniciar un juicio arbitral ante la Corte Internacional de Arbitraje de la Cámara de Comercio Internacional con miras a suspender el pago de la deuda", según el comunicado oficial.

La deuda está relacionada con la financiación de la construcción de la hidroeléctrica de San Francisco, recuerda el texto al señalar que "la decisión del Gobierno ecuatoriano fue anunciada en un evento público sin plena consulta o notificación al Gobierno brasileño".

"La naturaleza y la forma de las medidas adoptadas por el Gobierno ecuatoriano no corresponden al espíritu de diálogo, amistad y de cooperación de las relaciones entre Brasil y Ecuador", agrega el comunicado.

El Gobierno de Correa cuestiona una deuda de 243 millones de dólares (192 de euros) contraída por Ecuador a través del estatal Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES) para la construcción de la hidroeléctrica, que fue inaugurada en junio de 2007 y registró fallos estructurales hasta dejar de funcionar un año después.

La obra fue construida por un consorcio con participación de Odebrecht, una de las principales empresas privadas de Brasil y con operaciones en varios países de América.

"El BNDES se pronunciará sobre las alegaciones hechas por el Gobierno ecuatoriano sobre el contrato de financiación", según la Cancillería.

Los préstamos de este tipo son otorgados por el BNDES para la financiación de exportaciones de bienes y servicios de empresas brasileñas con operaciones en el exterior.

Deuda ilegal e ilegítima

La Comisión Especial de Auditoría de la Deuda Externa (CEA), creada por el presidente Rafael Correa en 2007, entregó un informe sobre una investigación que abarca los últimos 30 años en el que se habla de "ilegalidad e ilegitimidad", por lo que recomendó no pagar ciertos tramos de esos créditos.

Correa, que participó de la presentación del informe, dijo que su administración, además de intentar no pagar esa deuda "ilegítima, corrupta e ilegal", buscará a los culpables de ese proceso de endeudamiento externo irregular en el que estarían supuestamente involucrados ex presidentes del país y otros funcionarios.

Pesántez recordó que ningún ex funcionario está "exento" de las investigaciones y aclaró que "si es necesario dictar medidas cautelares" lo hará.

El ex presidente de Ecuador Sixto Durán Ballen dijo hoy "estar tranquilo" ante el anuncio del Gobierno de buscar a "los culpables de un proceso de endeudamiento externo irregular".

"Me siento tranquilo" dijo Durán Ballen, que gobernó el país entre 1992 y 1996, al asegurar que les "va a tomar mucho tiempo verificar sí es o no exacto" el informe de la CEA.

Durán Ballen dijo que las obras que se realizaron en su Gobierno "no se hicieron solas" y que fue una "bendición tener esos créditos".