Verona multará con 500 euros a los clientes de las prostitutas de la calle

• La ciudad italiana sancionará con la pena máxima a quienes compren sexo en la calle
• Suecia o el Ayuntamiento de Barcelona aplican normativas similares desde hace tiempo

El Ayuntamiento de la ciudad italiana de Verona ha decidido, a propuesta del alcalde, Flavio Tosi, elevar a 500 euros la multa a los clientes de las prostitutas, para luchar así contra el ejercicio de la prostitución en la calle.

Tosi explica, en un comunicado, que el "decreto de seguridad" aprobado por el Gobierno de Silvio Berlusconi, da a los alcaldes la posibilidad de graduar las diversas sanciones de 50 a 500 euros, según "la gravedad del comportamiento de quien comete un delito". En este caso, el alcalde decidió imponer la sanción máxima  por la violación de la ordenanza contra la prostitución.

El objetivo de la nueva ordenanza es "multar a quien contrata prestaciones sexuales para eliminar un fenómeno gestionado por organizaciones criminales, que con frecuencia reducen a la esclavitud a las mujeres dirigidas a la prostitución, y para eliminar la degradación y las molestias causadas a los ciudadanos".

La iniciativa de la ciudad italiana no es el primera que se adopta en Europa en este sentido, ya que Suecia castiga desde 2001 a los "compradores de sexo" con multas e incluso con penas de hasta seis meses de prisión.

En España, el Ayuntamiento de Barcelona aprobó en 2007 la Ordenanza de Convivencia, que establece multas que oscilan entre los 750 euros, por ¿el ofrecimiento, la solicitud, la negociación o la aceptación de servicios sexuales retribuidos en el espacio público¿ cuando se haga a menos de 200 metros de centros educativos, y los 3.000 euros por mantener relaciones sexuales retribuidas en la calle.

Otras ciudades españolas, como Málaga y Sevilla, también estudian multar a los clientes por demandar servicios sexuales en la vía pública.