Carlos Soria, a TVE sobre la subida al Manaslu: "Ha sido más duro de lo que pensaba, olvidé que tengo 86 años"
- El alpinista español se convirtió en el de más edad en ascender un 'ocho mil' tras la subida al Manaslu
- "Lo primero que pensé en la cima es en bajar, que es más duro que subir", añade el madrileño
El alpinista español Carlos Soria se recupera casi una semana después de la subida al Manaslu. Fue el pasado viernes 26 de septiembre y la gesta le convirtió en el más longevo en hacer cumbre en un 'ocho mil' (8.163 metros). Pero también le dejó extenuado, tal y como reconoce en una entrevista a TVE desde su domicilio. Lo primero en que pensó desde la cima: "En bajar, porque bajar es más cansado que subir". "Ha sido más duro de lo que pensaba", añade.
"A veces se me olvida que tengo 86 años. Ahora no me parecen mayores las personas de 86 años. Se puede seguir viviendo. No hay que pasarse, pero tampoco rendirse", afirma el madrileño. Pero por contra también es de los que cree que si se quiere, se puede "y mucho más de lo que uno piensa", aunque a la vez reconoce: "Quizá me pasé un poco. No pensé que se fuera a montar este follón, que fuera un récord internacional".
Soria revela que su intención inicial era hacer "un homenaje". "Yo quería hacer una especie de festival. Volver a una montaña, el primer 'ocho mil' hecho por españoles, y hacer un homenaje. Eso se fue deshaciendo, pero yo dije 'voy a ir'", añade. Al principio tenía un patrocinador, revela, pero el inversor quería hacer una película y no le permitía usar las imágenes por su cuenta. Entonces, "dije 'fuera' y me lo he pagado yo con mi familia: más de 70.000 euros".
"Ha venido Luis Miguel López Soriano, compañero de muchas expediciones y cámara de altura como nadie, y ha hecho un reportaje que es una maravilla", ha añadido Soria. El camarógrafo y el alpinista han estado acompañados por los correspondientes sherpas, pero nadie más en la expedición.
"He perdido seis kilos"
"Ha merecido la pena, ha sido más duro de lo que pensaba, he olvidado que tenía 86 años y que era un récord", celebra. Pero al mismo tiempo admite la dureza del evento: "He perdido seis kilos y ya he recuperado un par de ellos. Ahora solo me apetece comer y dormir, llevo un par de días así y lo voy notando poco a poco. Se me rompió una prótesis y he tenido que comer con la lengua y el paladar. Ahora me apetece comer lentejas, patatas, fruta, cosas con proteína y con creatina".
¿De dónde saca las fuerzas? Dice que de hacer lo que le gusta, "no lo hago por dinero". Y qué es lo que pensó desde la cima del Manaslu, pues como afirma: "Que había que bajar. Y que bajar es más cansado que subir. Fue el momento más duro, bajar es mucho más peligroso".
Ya en 'tierra' empieza a tener una idea de la repercusión de su gesta: "Vaya por donde vaya todo el mundo se ha enterado y me quieren preguntar, pero es un poco duro. Yo quiero seguir viviendo y haciendo mi deporte, pero acoplándolo a la edad que tengo. Ahora me he pasado porque era una cosa tan bonita que no me he centrado más que en ir, pero ha sido duro. Me he dado un buen palo".
Como conclusión, Soria dice a TVE que quiere ser recordado "como lo que soy: un deportista, un trabajador. He tenido una vida muy dura. Nací en 1939 antes de que acabara la guerra, viví la postguerra en la miseria con grandes dificultades. Tuve que empezar a trabajar a los once años. Pero estoy contento con mi vida, he ido luchando para salir adelante".