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Lorenzo: la gran decisión, ¿Yamaha o Ducati?

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El piloto español de MotoGP Jorge Lorenzo del equipo Fiat Yamaha conduce su moto
El piloto español de MotoGP Jorge Lorenzo del equipo Fiat Yamaha conduce su moto

Tiene las dos ofertas encima de la mesa desde hace varios días. Dispone de todos los elementos para valorar las ventajas y desventajas de quedarse en Yamaha o bien fichar por Ducati. La marca italiana puede haber subido su oferta en las últimas horas hasta los siete millones de euros por temporada, catorce en total por los dos próximos años.

Pero Jorge Lorenzo todavía tiene dudas. Muchas dudas. Quizá porque sabe que es la decisión más importante de su trayectoria deportiva y que de ella depende buena parte de su futuro como piloto a corto y medio plazo. Y por ello se ha tomado un fin de semana de relax en su tierra, Mallorca. Lorenzo aterrizó este viernes 21 de agosto en el aeropuerto de Son San Joan y se dirigió a casa de unos familiares para pasar un par de días de descanso. Quiere reposar ideas. El 'habemus decisión' está muy cerca. Yamaha y Ducati le presionan para que aclare su futuro de inmediato.

Jorge Lorenzo se ha puesto de límite hasta este lunes 24 de agosto para tener decidido con qué marca correrá el campeonato del mundo de MotoGP de 2010. Y es que el mallorquín está bloqueando muchos movimientos en el puzzle de fichajes para acabar de configurar la parrilla de salida de la próxima temporada.

¿Qué le ofrece cada uno?

Su actual equipo, Yamaha, ofrece a Jorge Lorenzo una mejora sustancial en su sueldo como piloto oficial de la marca de los diapasones cruzados. Yamaha llega hasta los 2,5 millones de euros por los 5 -ó 7 en las últimas horas- que le pone encima de la mesa Ducati.

Yamaha no le promete trato de número 1 porque ese rol lo ha jugado, juega y seguirá jugando hasta que se retire, Valentino Rossi. En Ducati tampoco le prometen que sea número 1 porque según ellos en ese box no hay número 1 y número 2. En Ducati funcionan como una familia sin hijos predilectos.

Deportivamente en Yamaha no pueden ofrecerle más de lo que le están ofreciendo actualmente, una moto ganadora con la que puede luchar con el gran Rossi de tú a tú por el título mundial. Ofrecerle algo más sería desbancar a Rossi de su lista de preferencias y eso no lo van hacer.

Ducati le ofrece una moto campeona en 2007 y una electrónica de lo más avanzada, no en vano utilizan Magneti Marelli, la misma empresa que trabaja con Ferrari en Fórmula-1. Ducati le promete trabajo incansable y una confianza ciega en sus posibilidades. Incluso aceptan que llegara al box rojo con sus personas de confianza: Ramón Forcada como ingeniero de pista y Juan Llansá, su mecánico de toda la vida.

Tanto si se queda en Yamaha como si se va a Ducati Lorenzo tendrá desafíos de primer nivel. Si continúa en Yamaha el reto es ganarle un mundial a Rossi con su misma moto. Si se va a Ducati el reto es ser campeón con la moto más complicada de la parrilla. ¿Sería capaz de igualar los éxitos de Stoner con la Desmosedici?

Por otro lado, Lorenzo sabe que cualquier decisión que tome no dejará indiferente a nadie: si se va a Ducati le acusarán de rendirse a las presiones de Rossi, que le quiere lejos. Y siente que eso sería dejar los deberes sin acabar. Si se queda en Yamaha cuestionarán su valor para enfrentarse a la GP10. Y eso, su orgullo, no lo puede permitir.

Dicen que las decisiones más acertadas son las que cuestan menos tomar. Quedarse en Yamaha es la decisión menos traumática, la menos radical, la más suave, quizá la que nunca tomaría un guerrero. Adivinen cuál es su segundo apellido.