El Barça, líder, y el Sevilla, tercer clasificado, se enfrentan este viernes en Liga y Setién cree que es un beneficio jugar sin el público hispalense, mientras que Lopetegui ha recordado que cuando un equipo tiene a Messi "está todo dicho".
El Barça recibe este martes al Leganés en el Camp Nou. Partido a puerta cerrada por el protocolo anti coronavirus que será especial para el danés Martin Braithwaite, fichado este invierno por los culés precisamente del equipo rival.
El futbolista del Athletic Club de Bilbao Iker Muniain ha hablado con RTVE el día después de que su equipo retomara la competición tras el parón por el coronavirus. Lo hizo empatando ante el Atlético de Madrid 1-1 con un gol suyo, que dedicó precisamente a las víctimas de la pandemia. "Competimos los dos muy bien. El punto es justo", ha comentado sobre el partido de Liga. Y sobre la novedad de jugar con el protocolo de prevención de contagios, en especial sin público, ha dicho que es una "situación extraña" porque están acostumbrados a hacerlo "con mucho ruido". "Ttodos los equipos nos estamos adaptando bastante bien, también porque no queda otra", ha añadido.
Además, sobre los horarios de estas jornadas ha dicho que aunque su equipo tiene una "pequeña desventaja" por jugar con menos descanso que otros rivales, "seguramente se compensará" hasta el final del campeonato. "Para nada tiene que ser una excusa", ha zanjado el navarro, que a sus 28 años disfruta de una época muy buena tanto en el plano personal como profesonal. "Atravieso un momento muy feliz . Y cuando te encuentras así intentas reflejarlo en el campo", ha explicado.
El entrenador del FC Barcelona, Quique Setién, ha defendido al delantero francés Antoine Griezmann como "indiscutible". El galo se perfila como titular este martes ante el Leganés, a pesar de su flojo rendimiento en la victoria contra el Mallorca (0-4). El técnico cántabro, por contra, prefiere no arriesgar con Luis Suárez pese a su evolución positiva.
Poco más de media hora necesitó el Real Madrid para ganar al Eibar 3-1 este domingo. A pesar de una buena primera parte se relajó en la segunda mitad, algo que llevó al entrenador, Zinedine Zidane, a dar un toque de atención a sus jugadores en la pausa para la hidratación. Con el 3-0 el equipo levantó tanto el pie del acelerador que casi permitió al Eibar meterse en el partido. El técnico francés no ahorró en gestos para recuperar la intensidad de los suyos.
