El Primer Ministro francés, Édouard Philippe, ha presentado el plan de desescalada ante la Asamblea Nacional. El desconfinamiento puede avanzar "más decididamente" a partir del 2 de junio, ha anunciado Philippe, si los indicadores de la enfermedad revelan que está remitiendo. De no ser así, ha avanazado que Francia deberá seguir con medidas de control, incluso más contundentes. El Primer Ministro ha revelado que a partir del 11 de mayo pretende realizar 700.000 test semanales y que, de momento, los jardines de infancia y enseñanza para los más pequeños solo abrirán en los departamentos donde el virus esté menos activo. Las playas permanecerán cerradas hasta el día 1 de junio, las mascarillas serán obligatorias en el transporte público y los grandes acontecimientos deportivos y culturales quedan definitivamente suspendidos. No habrá continuación de la Liga de fútbol 2019-2010. Informa Paco Forjas.
El primer ministro francés, Édouard Philippe, ha presentado este martes en la Asamblea Nacional su plan de desescalada para el próximo 11 de mayo, fecha en la que Francia comenzará a levantar las restricciones por el coronavirus COVID-19. Según el primer ministro la desescala se hará de forma ordenada y por territorios, protegiendo a la ciudadanía y haciendo test PCR para evitar nuevos rebrotes.
En Portugal, con 24 mil casos de coronavirus y cerca de 950 muertos, la curva de contagios está bajando y creen que la pandemia está controlada. En mayo tienen previsto recuperar la actividad aunque los expertos piden que sea gradual para no echar por tierra semanas de confinamiento.
El presidente de Portugal, Marcelo Rebelo de Sousa, ha anunciado que el estado de emergencia se levantará en la medianoche del sábado al domingo. Sin embargo, ha aclarado que eso no va a significar a un retorno a la normalidad previo a la pandemia y no ha descartado tener que volver a declarar la emergencia si es necesario. A pesar del cambio se van a mantener las restricciones a los movimientos y seguirán prohibidas las aglomeraciones en los lugares públicos, pero sin que el Gobierno de capacidades para legislar por decreto. Hasta el momento, Portugal ha registrado 24.000 contagios y 928 muertos por coronavirus.
Después de días de temores, los epidemiólogos alemanes advierten que sus cifras han empeorado después de abrir las tiendas. Su vecina Austria planea hacer vida relativamente normal a partir del viernes, manteniendo la distancia de seguridad. Los bares y restaurantes abrirán el 15 de mayo, con un metro entre mesas y cuatro comensales. También abrirán hoteles el día 29 y las piscinas. La tasa de contagio es de 0,6.
A mediados de mes era similar en Alemania. Ahora es de 1, el límite en el que la epidemia está controlada. Angela Merkel ha dicho que el margen es muy estrecho, porque si llega a 1,6 el sistema alemán colapsaría en junio. Por eso, el Gobierno recomienda quedarse en casa siempre que sea posible y mantener el distanciamiento social.
Un equipo de Televisión Española ha estado en el nuevo hospital para enfermos de COVID-19 que acaban de abrir en Moscú. Levantado en un mes y con capacidad para casi mil pacientes enfermos, pretende atajar la falta de camas.
Hace unas semanas, el uso de la mascarilla solo era obligatorio en la ciudad de Jena, pues el Gobierno Federal desaconsejó su uso ya que daba "falsa sensación de seguridad". Ahora, con buena parte del comercio reabierto, rectifican al ver el peligro: desde hoy, salvo en Schleswig-Holstein, es obligatorio su uso, salvo en colegios y en trenes de larga distancia. Con todo, hay disparidad en las sanciones: en la capital no se multa, pero sí en Baviera, donde alcanzan los 10.000 euros por incumplir la norma. La policía ha pedido una norma común.
Apenas 3 kilómetros separan el pueblo de Tui, en Pontevedra, y Valença, en Portugal. Sus vecinos están acostumbrados a cruzar la frontera a diario y ahora eso ha cambiado por el estado de alarma. La vida en una y otra localidad es muy distinta.
En Alemania es el primer día de mascarilla obligatoria en el transporte público y el comercio en la mayoría de regiones del país. En Berlín se han abierto los colegios sólo para los alumnos del último curso de secundaria, y en condiciones muy controladas.
Boris Johnson ha reaparecido este lunes en Downing Street después de tres semanas recuperándose del coronavirus, que le llevó incluso a la UCI de un hospital de Londres. El primer ministro británico ha asegurado que, aunque querría movilizar la economía lo antes posible, aún no es el momento de suavizar el confinamiento.
El primer ministro del Reino Unido, Boris Johnson, se reincorpora este lunes al trabajo tras haber superado el coronavirus. Johnson ha agradecido al Reino Unido los esfuerzos y la fortaleza para hacer frente a la pandemia de la COVID-19, en una comparecencia ante la prensa ante Downing Street, y ha advertido que el país está frenando el avance de la enfermedad pero que las medidas de confinamiento aún no pueden ser suavizadas. Coronavirus: última hora en directo.
En su primera aparición pública tras su salida del hospital el primer ministro británico, Boris Johnson,ha señalado que es pronto para rwlar el confinamiento. Asegura que las medidas se irán moderando poco a poco y a su debido tiempo a pesar de que la curva ha mejorado.
Las mascarillas, símbolo de esta crisis sanitaria, son uno de los objetos que no pueden faltar en esa futura exposición del confinamiento, pero también habrá otros objetos cotidianos que nos han permitido cocinar en casa o trabajar. Y tampoco faltará el papel higiénico u otros elementos intangibles muy presentes estos días en los balcones como la solidaridad. | Última hora del coronavirus.