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Mahón, el refugio más antiguo de la ópera en España

  • Las mañanas de RNE, desde el Teatro Principal de Mahón
  • Un escenario para la ópera más antiguo que el Real o el Liceo

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Las mañanas de RNE - Mahón, el escenario más antigüo de la ópera en España

Las mañanas de RNE se ha emitido este lunes desde el Teatro Principal de Mahón, el teatro de ópera más antiguo de España, más que el Real de Madrid y que el Liceo de Barcelona, emblemas de la representación de este género musical teatral.

Un teatro muncipal, del que se enorgullece la alcaldesa de Mahón y presidenta de la Fundación Teatro Principal de Mahón, Conxa Juanola. "Es un orgullo para los mahoneses pero también para los menorquines, porque el teatro es de todos los menorquines".

"Que en una ciudad y una isla tan pequeña como es Menorca se puede ver ópera de gran calidad. Que en Europa una ciudad de 20.00 habitantes pueda hacer ópera de la calidad que la hacemos aquí, es difícil", ha asegurado Juan Pons, barítono que ha actuado en el escenario del Teatro Principal en más de una ocasión.

Se trata de un edificio que se construyó en 1829 de la mano del arquitecto italiano Giovanni Palagi, sobre los restos de la muralla que rodeaba Mahón. Y desde entonces, salvo los periodos de reforma, no ha parado de ofrecer cultura.

El diseño es el de un clásico teatro italiano en forma de herradura, factor clave para una acústica inmejorable. La capacidad del recinto es de 837 localidades aunque 160 son de visibilidad reducida.

Juanola ha afirmado también que "tener este teatro en Mahón se explica por el nivel cultural que ha tenido siempre la isla", cuyos habitantes siempre han tenido afición por la ópera. Desde el siglo XVIII hay constancia de espectáculos de ópera en la capital menorquina. El puerto de Mahón era refugio o parada obligatoria de navíos de todas las procedencias. Aquí amarraban la mayoría de compañías que navegaban rumbo a otros países. Mucha tradición operística en general y de ópera italiana en particular.

En 1820 y 1824, por ejemplo, La Cenerentola y La Gazza Ladra, de Rossini, fueron estrenadas en Mahón, prácticamente al mismo tiempo que lo hacían en Barcelona. Lo mismo pasó con La Straniera de Bellini, representada por primera vez en la ciudad condal en 1831 y estrenada en Mahón ese mismo año.