La historia de la animación a través de sus anécdotas y curiosidades

• Pedro Delgado Cavilla publica Animación. De Betty Boop a Tim Burton
• Una nueva y amena mirada sobre los dibujos animados

'La novia cadáver', de Tim Burton

Hay muchos libros sobre la historia de la animación pero pocos tan curiosos, originales y amenos como Animación. De Betty boop a Tim Burton (Diábolo ediciones), de Pedro Delgado Cavilla. En que que encontramos la información más rigurosa pero también cientos de anécdotas y curiosidades sobre los dibujos animados.

Pero dejemos que él mismo nos describa este volumen: “Es un libro de retazos, con capítulos muy dispares. De algunos casi no se ha hablado, como los plagios en los orígenes del cartoon, guerras entre creadores, algunas veces mediatizados por productores miopes, que afortunadamente fueron unos pocos. O el surgir del cine africano de animación,  los títulos de crédito -grandes desconocidos-, la animación en la II Guerra Mundial para combatir al enemigo con dibujos… O ese capítulo dedicado a puppets, muppets, marionetas con hilos...”

“Hay que tener en cuenta –continúa- que animar es una palabra latina que quiere decir dar ánima, dar alma, dar vida. El puritanismo en esta profesión quizás ha querido reducirlo a unas formas concretas, pero ahí tienes a Richard Williams, director de animación de ¿Quién engañó a Roger Rabbit? En su excelente libro The Animator`s Survival Kit hace encendidos elogios de los Muppets y su modélico sentido del timing. Que el puritanismo del sector quizás no lo acepte, sinceramente no me preocupa; en la historia ese tipo de personas cazaba brujas donde no las había, pero afortunadamente ya no disponen de piras para quemar a nadie…espero (risas)”

Portada y página de 'Animación. De Betty boop a Tim Burton'

El libro

Se nota que Pedro sabe de lo que habla porque no solo escribe sobre animación sino que la vive. Comenzó su carrera en los estudios de Cruz Delgado (El Quijote) y desde entonces ha dedicado su vida a este arte. Dirigió el largometraje de animación La puerta del tiempo (Nominado al Goya en 2003) y ha sido guionista de varias películas y documentales. También ha dado clases de animación durante muchos años y ha sido ilustrador y humorista gráfico en medios como El País.

Este libro, como nos cuenta Pedro, tiene un planteamiento muy original: “Pese a que disimuladamente he seguido un orden lógico, desde los orígenes hasta lo último que se ha hecho con Tintín en 3D, por ejemplo, el lector puede escoger cualquier capítulo aislado”.

Le preguntamos qué ventajas cree que tiene el cine de animación frente al de imagen real. “No es una pregunta muy fácil de responder. Acaso con la animación puede alcanzarse una poesía que con la imagen real resulta más difícil conseguir. Por ejemplo el cortometraje “La flor más grande del mundo” dirigido por Etcheverry y producido por Chelo Loureiro con la voz del propio Saramago,  autor del cuento”.

“Pero hoy las nuevas técnicas incorporadas a la imagen real logran resultados sorprendentes -continúa-. El King-Kong de Peter Jackson es absolutamente verosímil. En cambio es difícil de igualar la magia del primer gran gorila en blanco y negro, el King-Kong que dirigieran Cooper y Schoedsack incorporando muñecos para dar vida al simio y los animales prehistóricos (que animó Willis O’Brien)”.

'Betty Boop', una de las primeras estrellas de la animación

“Me pregunto si la animación ha perdido imaginación”

Con una carrera tan larga en el mundo de la animación, le preguntamos cómo ve los cambios de estas últimas décadas: “Ahora es más fácil conseguir resultados. Aunque muchas veces me pregunto si se ha perdido imaginación. Pese a ello, hay obras que no pertenecen al cine estadounidense, que están marcando nuevos caminos, por ejemplo el largometraje Persépolis (2007) realizado en Francia, en un sencillo 2D de la dibujante Marjane Satrapi y Vincent Paronnaud o en este país el largometraje Arrugas (2011) de Ignacio Ferreras, que toca un tema tan adulto como el alzheimer, o la recientísima Buñuel en el laberinto de las tortugas de Salvador Simó, ambas del productor Manuel Cristóbal, con quien compartí años en la Junta Directiva de la Academia, cuando dejó su cargo Pablo Núñez y él le sustituyó”.

Y habiendo dado sus primeros pasos en la animación con Cruz Delgado (El Quijote), es normal que dedique un capítulo. “Cruz es todo un referente –asegura-, porque logra hacer buenos largometrajes con un depurado estilo muy clásico. Cruz es un academicista, algo que no es fácil. Un buen ejemplo es su largometraje Los viajes de Gulliver”.

“Cruz –continúa- trabajó en unos años donde era casi imposible levantar una producción. Eso aumenta su mérito. Pero como somos un país muy cainita en el que no admitimos el éxito en los demás, no estoy muy seguro de si hemos sabido reconocer su tremenda importancia”.

'Don Quijote de la Mancha', de Cruz Delgado

El futuro de la animación española

Uno de los capítulos que más nos ha sorprendido del libro es el que ha dedicado a la relación entre la animación y el terror. “Lo he hecho porque me interesan las emociones. El cine, como la literatura, la pintura o cualquier arte debe transmitir emoción. El terror es un sentimiento que atrapa, como la risa o el llanto. Con animación se puede hacer cosas muy interesantes, no hablo de cine “gore” que me parece el más facilón y de escaso buen gusto”.

“Algunas pelis españolas con este género y mucho humor son divertidísimas, descacharrantes, como el largometraje Pos eso, de Sam Ortí Martí, un director que tiene la manía de comerse las últimas consonantes de sus apellidos (es broma). Otras son inquietantes como Extraordinary Tales, la selección de cortos del gran Raúl García, o la cuidada O Apóstolo, ambientada en la Galicia rural.

Y ya que hablamos de animación española… ¿Cómo ve el presente y el futuro de nuestras producciones? “Hace años teníamos una potente infraestructura que por diferentes razones, entre ellas la desidia de grandes medios, hemos perdido. Había estudios, por ejemplo entre ellos el de Cruz Delgado en Madrid o el de Jordi Amorós en Barcelona, con quien también trabajé”.

“Hoy, yo no hablaría de que España sea una potencia de la animación, sino del potencial que tiene. Lo nuestro casi es un futurible. Mientras los estudios se estructuren en torno a proyecto y cuando estos se acaben envíen a los dibujantes y técnicos a casa, no seremos una potencia. Hacer obras de calidad no es suficiente para crear industria. Son más aspectos. Por otra parte, a veces parece que faltan estrategias”.

'O Apóstolo'

“El futuro está en el cine independiente”

Desde hace casi tres décadas la animación comercial está dominada por Disney-Pixar. Aunque este año han tenido que claudicar ante la imaginación desbordante de Spider-Man: Un nuevo Universo.

“El Spider-Man de Ramsey y sus colegas es entretenidísimo –afirma Pedro-. Pero no se aparta demasiado del cine espectáculo, que corre el riesgo de no emocionar demasiado, porque constantemente estamos viendo escenas arriesgadas, maravillosos movimientos de cámara, vuelos de personajes…En fin, soluciones no muy nuevas, aunque con guiones muy esmerados llenos de guiños adultos…¡Por fin!”

Pero en cuanto al futuro de la animación Pedro cree que: “Acaso el cambio puede venir de la mano del cine independiente. Y lo que digo no es una renuncia del 3D, al que dedico muchas líneas sobre películas como Los mundos de Coraline, Paranorman… El futuro caminará del brazo de la realidad virtual y los hologramas”.

Mujeres y animación

El año pasado las animadoras españolas crearon la asociación MIA (Mujeres en la Industria de la Animación), para luchar por sus derechos y lograr más igualdad. Ya que hay muchas féminas en la animación pero no ocupan cargos de responsabilidad.

Pedro dedica un capítulo del libro a las animadoras iberoamericanas y nos comenta que: “El papel de las mujeres en la animación es incipiente. Hace poco veía una foto de los participantes en un congreso latinoamericano sobre la lactancia materna… ¡Y todos eran hombres!”

“Casi diría que son heroínas las mujeres metidas en producción y en animación. Me gusta que escojan los asuntos que les interesan, tantas veces sin buscar la complacencia de los mercados” –añade-.

Este es el segundo libro sobre animación de Pedro tras su colaboración con Cruz Delgado Sánchez en Hanna Barbera. La animación en serie (Diábolo ediciones). Y no será el último: “La verdad que el hecho de escribir -y ya estoy con mi próximo libro- lo simultaneo con otras actividades. La enseñanza me ocupa pocas horas al año. En la actualidad la mayor parte de mi tiempo lo invierto en guionizar. Colaboro con una productora de documentales (imagen real) y largos como guionista, que ocupa prácticamente todo mi tiempo”.

“Lo último que hice en animación fue el diseño de cabecera para un largometraje de imagen real” –Concluye Pedro-.