La Justicia francesa ratifica la condena de prisión para Kerviel pero obliga a repetir el juicio civil
- Jérôme Kerviel no tendrá que devolver 4.900 millones a Société générale
- El exempleado de banca será juzgado de nuevo en Versalles
El Tribunal Supremo, la más alta instancia jurídica francesa, ha confirmado este miércoles la condena penal al exempleado de Société Générale (SG), Jérôme Kerviel, de cinco años de prisión de los que dos están exentos de cumplimiento.
La corte de casación, sin embargo, ha anulado la condena civil impuesta por el Tribunal de Apelación que obligaba a Kerviel a pagar daños y perjuicios por un importe récord de 4.900 millones de euros, igual a la suma de las pérdidas sufridas por el banco. El alto tribunal devuelve el caso a la corte de apelación de Versalles.
El Supremo francés considera ha considerado que en un caso como éste, debe estudiarse si la sola responsabilidad del bróker está en causa o si hay "responsabilidades compartidas", por lo que también habría que compartir las indemnizaciones.
La apelación consideró a Kerviel como único responsable del fraude y le impuso en segunda instancia en octubre de 2012 la multa de 4.900 millones de euros en concepto de daños y perjuicios, un récord para un individuo en Francia. La cifra corresponde al daño causado a SG por las inversiones desconsideradas que efectuó durante años Kerviel, que hicieron temblar los cimientos de uno de los principales bancos franceses.
El acusado conoció la sentencia cuando peregrinaba a pie desde Roma, donde hace unos días visitó al papa Francisco, y que debería llevarle a París en los próximos días.
La decisión, bien acogida por las dos partes
Por parte del banco, el abogado Jean Veil consideró que Société Générale ha ganado el caso, porque en el apartado penal se confirma la pena. "Siempre hemos dicho que los hechos demostraban que había fallos en nuestro sistema y los hemos reparado, con inversiones de cientos de millones de euros", ha afirmado el letrado.
El banco defiende que Kerviel maquilló sus inversiones para no ser identificado por los sistemas de control.
Patrice Spinosi, el letrado del acusado, lo consideró como "una primera gran victoria" de Kerviel, que había perdido sucesivamente los juicios en primera y segunda instancia. "A partir de ahora vamos a poder demostrar la responsabilidad de SG", ha agregado el letrado, que mantiene que los gestores de la entidad conocían la forma de actuar de su cliente, por lo que no pueden hacer recaer en sus espaldas toda la responsabilidad.
Los abogados de Kerviel sostienen que SG sabía la forma de actuar de su cliente, que durante años dio importantes beneficios a la entidad y aseguran que montaron un complot contra él para ocultar las pérdidas provocadas por la incipiente crisis financiera en 2008. "Mi cliente aumentó sus objetivos un 1.700%, el banco no puede decir que no supiera nada", asegura el letrado de Kerviel.
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