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Gorbachov denuncia el "fraude" de las elecciones rusas y llama a repetir los comicios

  • Toda la oposición ha denunciado numerosas irregularidades y falsificaciones
  • Varios cientos de opositores rusos han sido detenidos durante las manifestaciones
  • Las protestas contra el fraude electoral han llegado a Kaliningrado

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El expresidente soviético Mijaíl Gorbachov ha llamado a las autoridades de Rusia a anular los resultados de las elecciones parlamentarias del domingo pasado y a convocar nuevos comicios.

"Los dirigentes del país deben admitir que tuvieron lugar numerosas falsificaciones y fraudes, y que los resultados no reflejan la voluntad de los electores", ha señalado Gorbachov a la agencia Interfax.

Por eso, ha añadido, "considero que las actuales autoridades deben adoptar una sola decisión: anular los resultados de las elecciones y celebrar unas nuevas".

El exlíder soviético ha indicado que "con cada día que pasa son más los rusos que consideran que los resultados electorales no son limpios. A mi modo de ver, el hacer caso omiso de la opinión pública mina el prestigio de la autoridad y desestabiliza la situación", ha indicadoGorbachov.

Las declaraciones del político cuyas reformas cambiaron el mundo en el último cuarto del siglo XX se producen después de dos jornadas de protestas populares en varias ciudades de Rusia, que se han saldado con más de un millar de detenidos.

Mientras en Moscú las autoridades reforzaban la medidas de seguridad en  el centro de la ciudad, las manifestaciones se han extendido al enclave  báltico de Kaliningrado, fronterizo con Polonia, en cuya capital  homónima un millar de personas ha salido este miércoles a las calles,  según la agencia Interfax.

Manifestaciones de protesta han tenido lugar estos días, además de  Moscú, en San Petersburgo, Rostov del Don, Samara, Sarátov, Majachkalá,  Novosibirsk, entre otras ciudades.

Irregularidades a favor del oficialismo

Los manifestantes denuncian que las elecciones fueron fraudulentas para favorecer a Rusia Unida (RU), el partido del primer ministro Vladímir Putin que, no obstante, ha perdido 77 escaños respecto a los comicios de 2007.

Según los datos oficiales, escrutado el 99,9% de los votos, RU obtuvo el 49,3% de las papeletas, lo que le supone 238 de los 450 escaños de la Duma, la cámara baja del Parlamento ruso.

Todos los sectores opositores han sido unánimes al denunciar graves irregularidades en los comicios del domingo. Guennadi Ziugánov, el líder del Partido Comunista, la segunda fuerza más votada, denunció que el oficialismo se atribuyó hasta un 15% más de votos de los que obtuvo en las urnas.

El cabeza de lista del partido ruso Yábloko, Grigori Yavlinski, ha propuesto a los diputados de la oposición que renuncien a sus escaños y exijan la convocatoria de nuevos comicios. "Todos los partidos que consideran que ha tenido lugar un gran fraude deben renunciar a sus escaños y forzar con ello la celebración de nuevas elecciones, que tengan en cuenta lo que ha sucedido", ha pedido el histórico líder de los liberales, que no han logrado superar el tope del 7%de votos para acceder a la Duma o cámara baja del Parlamento.

"No hay que hablar de que os han engañado. Renunciad (a los escaños), y entonces habrá elecciones, ya que los 238 diputados (de Rusia Unida) no podrán permanecer en la Duma", ha afirmado Yavlinski.

Toda la oposición denuncia el fraude

El propio Yábloko denunció "el robo" de dos tercios de los votos que les dieron los ciudadanos de Moscú, donde la formación logró el domingo uno de sus mejores resultados.

"El fraude es enorme, similar al que se produjo en las elecciones a la asamblea parlamentaria de Moscú en 2009. A Yábloko le robaron en Moscú dos tercios de sus votos, al igual que entonces", ha denunciado el máximo dirigente del partido, Serguéi Mitrojin.

El exdirigente ruso no ha sido el único que ha criticado las irregularidades cometidas durante el escrutinio el pasado domingo. La secretaria de Estado norteamericana, Hillary Clinton, denunció que “las elecciones de Rusia no fueron ni libres ni justas”. “Los electores rusos merecen una investigación completa del fraude electoral y la manipulación”, criticó.

Las denuncias de numerosas irregularidades por parte de la misión de  observadores internacionales de la OSCE y la Asamblea Parlamentaria del  Consejo de Europa (PACE) durante el escrutinio han vuelto a empañar los  comicios.

"La calidad del proceso electoral se deterioró considerablemente durante el escrutinio, que se caracterizó por frecuentes violaciones de procedimiento y casos de aparente manipulación,  incluidos indicios graves de introducción masiva de papeletas en las  urnas", rezaba el la misión de  observadores internacionales de la OSCE y la Asamblea Parlamentaria del  Consejo de Europa (PACE) internacionales tras el escrutinio. "Las elecciones destacaron por la injerencia de  las autoridades".