El BCE defiende la reforma laboral porque si no "la situación del empleo sería peor"
- Aboga por mantener el ajuste presupuestario y reformar las pensiones
- España ha perdido un 25% de competitividad en diez años respecto a Alemania
El consejero español del Banco Central Europeo, José Manuel González-Páramo, ha defendido la reforma laboral porque considera que sin ella "la situación del empleo sería peor".
En una entrevista en 'Los desayunos de TVE', González-Páramo ha explicado que el aumento del paro no depende sólo de las instituciones laborales y que la reforma laboral contribuye a impulsar la reactivación del mercado laboral y que sin "no estuviera ahí (la reforma) la evolución del empleo sería peor".
Ha señalado también de que si finalmente se rectificase la reforma laboral por la presión de los sindicatos tras la huelga general se obstaculizaría la salida de la recesión.
El consejero del BCE ha explicado que el éxito del euro "ha protegido a algunos países de la necesidad de hacer reformas antes" y matiza que en el caso de haber adelantado la reforma laboral se podría "paliado la caída de la competitividad y el empleo" pero subraya que "nunca es tarde si la dicha es buena".
Ajuste y reforma de las pensiones
González-Páramo ha valorado la reacción del Gobierno ante la crisis de deuda soberana como "la mejor que se podía esperar" y ha insistido en que ahora es necesario mantener el rigor en el ajuste presupuestario y seguir con la reforma del sistema de pensiones, puesto que es "difícil discutir" que el aumento de la esperanza de vida afecta a la viabilidad de la Seguridad Social.
Al respecto, afirma que es de "pura responsabilidad" y de "justicia" adaptar la edad de retiro a la esperanza de vida y a la capacidad laboral del futuro jubilado.
El consejero del BCE ha indicado que en los últimos diez años España ha perdido un 25% de competitividad respecto a Alemania, por lo que ha defendido que el trabajo sea más eficiente y más productivo.
Acerca de una posible subida de impuestos, opina que las opciones fiscales deben ser tomadas por el Gobierno, aunque apunta como posibilidad las tasas medioambientales o que se luche más contra el fraude fiscal. Por ello, se muestra más partidario de las reformas que se basan en la contención y en el recorte del gasto, ya que son las que "duran y se estabilizan".
Por último, ha sostenido que el ajuste del precio de la vivienda en España es bueno y que sería deseable que se produjese con mayor celeridad, ya que facilitaría el acceso a un piso a la gente.