Silbidos y gritos de 'Zapatero, dimisión' durante el desfile militar de la Fiesta Nacional

• Defensa atribuye los abucheos a "pequeños grupos  organizados" en la red
• En el desfile han participado 3.000  militares, 153 vehículos y unas 50  aeronaves
• Los actos comenzaron con el izado de la bandera nacional
• El desfile militar de este año homenajeaba a varios países iberoamericanos
• La bandera de Venezuela no participa  en la parada militar de la Fiesta Nacional

3.000 militares, mil menos que el año pasado, han participado en el desfile de la Fiesta Nacional

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, fue recibido este martes con silbidos y gritos pidiendo su dimisión a su llegada a la Plaza de Lima para asistir al desfile militar con motivo de la Fiesta Nacional.

Poco antes hicieron su entrada los Reyes, Don Juan Carlos y Doña Sofía, para presidir la parada, en la que participarán más de 3.000 militares, 153 vehículos y unas 50  aeronaves.

Los silbidos procedentes del público situado en las inmediaciones de las tribunas de autoridades e invitados fueron más fuertes cuando el narrador pronunció su nombre al anunciar que recibía a los Reyes.

Incluso se mantuvieron en el momento en el que Zapatero procedía a saludar a Don Juan Carlos y Doña Sofía, y hasta que sonaron los primeros acordes del himno nacional. Este ya es el quinto año consecutivo en que Zapatero es recibido de esta forma en la Fiesta  Nacional.   

El Ministerio de Defensa atribuye los silbidos y abucheos al presidente del Gobierno a "pequeños grupos  organizados" que habían sido "convocados" a través de las redes sociales, como facebook y twitter, y de mensajes de texto vía teléfono móvil. 

Homenaje a los que dieron su vida

Los Reyes y los Príncipes, acompañados por la Infanta Elena y los Duques de Palma, saludaron a su llegada al jefe del Ejecutivo, a la ministra de Defensa, Carme Chacón, y otros miembros del Gobierno. 

Entre otros, se ha visto charlando al presidente del Gobierno con el alcalde de Madrid, que en los últimos días ha criticado con dureza que se prohiba refinanciar con nuevos créditos la abultada deuda del Ayuntamiento de la capital.

Tras el saludo, el Rey, ataviado con el uniforme de capitán general  del Ejército de Tierra,  recibió honores de la Guardia Real y pasó revista a la fuerza antes de situarse con el resto de la Familia Real  y el Gobierno en pleno en la tribuna de autoridades.

Después tuvo lugar el salto de un equipo de la Patrulla  Paracaidista Acrobática del Ejército del Aire (Papea), desde un avión  C-212, con la bandera nacional, ante la tribuna de autoridades. La llegada de  la enseña dio paso al homenaje a los que dieron su vida por España.    

Este homenaje presidido por el Rey recuerda especialmente este año a los siete  militares y un intérprete español adscrito al Ejército que han fallecido  en 2010 (cuatro en Afganistán y cuatro en Haití).

Montilla ha estado presente

Los Reyes, acompañados por los Príncipes de Asturias, saludaron a todos los miembros del Gobierno presentes  (14 de los 17) y Don Juan Carlos se detuvo unos instantes con la  ministra de Sanidad, Trinidad Jiménez.

Este año también ha participado el presidente de la Generalitat, José Montilla, tras su ausencia en las dos últimas celebraciones institucionales del Día de la Hispanidad. Su presencia ha sido criticada por sus socios del tripartito ERC e  ICV-EUiA.

También han acudido los presidentes de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre; Castilla-La Mancha, José   María Barreda; Extremadura, Guillermo Fernández Vara; Galicia,  Alberto  Núñez Feijóo; Navarra, Miguel Sanz, y Cantabria, Miguel Angel  Revilla,  así como el presidente de Ceuta, Juan Jesús Vivas.

En representación del lehendakari Patxi López ha acudido la consejera de Educación, Isabel Celaá.

También se encuentran en las tribunas de autoridades el presidente del  Tribunal Supremo y el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ),  Carlos  Dívar, la presidenta del Tribunal Constitucional, María Emilia  Casas, y  los presidentes del Senado y el Congreso, Javier Rojo y José   Bono.

Falta la bandera de Venezuela

La bandera de la República Bolivariana de Venezuela no desfiló este martes por el Paseo de la Castellana de Madrid, aunque inicialmente estaba previsto que lo hiciera. Un hecho que  coincide con la polémica abierta por la presunta relación de un miembro de ETA Arturo Cubillas, que según la  justicia española impartió entrenamiento  a dos supuestos miembros de la banda terrorista ETA en Venezuela.

El desfile militar de este año homenajeaba a varios países iberoamericanos que celebran sus bicentenarios de independencia.

Según fuentes de Defensa, la enseña del país presidido por Hugo Chávez no ha participado por la "indisposición" de su abanderado.  Por ello, al final no desfiló la bandera de Venezuela junto a las enseñas de México, Ecuador, Colombia, Paraguay, Bolivia, Argentina, Chile y El Salvador.

Más de tres mil militares

La parada militar se desarrolla este año con la participación de más de 3.000 militares, casi un millar menos de miembros de las Fuerzas Armadas que el año pasado.

Frente a los más de 4.200 militares, 209 vehículos y 58 aeronaves del año pasado, en esta edición desfilan algo más de 3.000 militares, 153 vehículos y 50 aeronaves ante la tribuna de autoridades, situada en la Plaza de Lima por segundo año consecutivo. 

Los primeros en desfilar han sido la sección de motos de la Guardia Real, acompañada por el Mando y Estado Mayor de la Brigada Paracaidista del Ejército de Tierra (Bripac), la unidad actualmente desplegada en Afganistán, la unidad de veteranos de los tres ejércitos y de la Guardia Civil, y la unidad de reservistas voluntarios.

Seguidamente, la agrupación motorizada ha pasado frente a la tribuna de autoridades y el Ejército de Tierra ha exhibido al personal de los Regimientos de Artillería Antiaérea 71, 72 y 74 y del de Artillería de Campaña número 63, entre otras unidades.

También han participado la Unidad Militar de Emergencias (UME) y la Guardia Civil, con el Seprona incluido.

Por el Paseo de la Castellana han pasado los medios acorazados encabezados por el Regimiento de Infantería Acorazado Alcázar de Toledo 61, acompañados por el de Infantería Mecanizada Asturias y por la Brigada de Caballería Castillejos II, con sede en Zaragoza, así como una unidad del Tercio de Infantería de Marina.

Desde el aire y  a pie

Por el aire han desfilado 50 aeronaves de los ejércitos de Tierra, del Aire y la Armada y han pasado los cazabombarderos F18, Mirage F1, F5 y Eurofighter, los aviones de transporte C295, el reabastecimiento en vuelo Boeing 707 y aviones especializados en extinción de incendios CL215 Canadair, los "apagafuegos" . 

Después han cruzado el cielo aviones Harrier de la Armada y los helicópteros navales SeaHawk, los helicópteros de transporte Cougar y Chinook y el de combate Tigre del Ejército de Tierra.

El cierre del desfile aéreo lo ha marcado una pasada de los siete aviones de la acrobática Patrulla Aguila del Ejército del Aire.

Tras la exihbición aérea, de nuevo a pie, comenzó la última parte de la parada militar con un batallón de la Guardia Real con las banderas y estandartes de todos los que han desfilado y a los alumnos de las escuelas militares de los ejércitos y de la Guardia Civil.

Como colofón han desfilado las unidades que más participan en misiones en el exterior y han cerrado el desfile las unidades a caballo de la Sección Hipomóvil de la Guardia Real y el Escuadrón de Sables de la Guardia Civil.

Al finalizar el desfile, los reyes don Juan Carlos y doña Sofía han ofrecido en el Palacio de Oriente la tradicional recepción con motivo del Día de la Fiesta Nacional.