'Jimena' avanaza por el norte de México causando destrozos pero ya sin cateogría de huracán

• La tormenta aún provoca fuertes vientos y lluvias pero avanza por una zona desértica
• En algunos municipios 'Jimena' ha dejado decenas de casas precarias destruidas
• Protección Civil ha informado de que un pescador ha desaparecido en Puerto San Carlos

Niños de la ciudad de Los Cabos reciben comida caliente de militares en un albergue donde fueron evacuados de sus hogares debido a la aproximación del huracán 'Jimena'.

Jimena ha seguido perdiendo fuerza esta noche y ya no tiene la consideración de huracán, aunque sigue avanzando con fuertes lluvias y vientos por una zona desértica hacia el norte en la península de Baja California, en el noroeste de México. 

Fuentes de la Protección Civil han informado de que un pescador ha desaparecido en la localidad de Puerto San Carlos

A las 22.00 hora local (05.00 horas del jueves en la España peninsular) estaba sobre la sierra Agua Verde, al oeste de la población de Mulegé, en el estado de Baja California Sur, según el servicio meteorológico mexicano. Ahora produce vientos sostenidos de 110 kilómetros por hora y rachas de 140 km/h, aunque seguirá perdiedo fuerza.

El lunes, Jimena evolucionó hasta los límites de las categorías 4 y 5, la máxima en la escala la máxima en la escala Saffir-Simpson. Entonces, con vientos sostenidos 250 km/h era el huracán de mayor intensidad registrado en la costa del Pacífico norte en las últimas dos décadas.

La madrugada del miércoles tocó tierra con vientos de más de 150 km/h (categoría 2) y hasta ahora los mayores daños se han egistraron en Ciudad Constitución, una población de 70.000 habitantes del municipio de Comondú, donde el huracán derribó numerosas casas de construcciones endebles. 

También en Puerto San Carlos, de poco más de 4.000 habitantes, se han venido abajo numerosas construcciones precarias.

En otras zonas del estado de Baja California Sur las autoridades han dado de cuenta de daños mínimos. Incluso han dicho que las lluvias han sido beneficiosas para las labores del campo y el almacenamiento de agua. 

En los municipios de Los Cabos y La Paz, los más turistícos y poblados de Baja California, frecuentados mayoritariamente por estadounidenses, ya paseaban por las calles con un cielo despejado. 

Al menos 2.000 turistas extranjeros abandonaron entre el lunes y martes Los Cabos y unos 15.000 de los 20.000 habitantes que viven en zonas de alto riesgo habían sido evacuados o abandonado sus hogares.

Los expertos advierten de que este sistema aún puede generar fuertes lluvias en el sur de la península de Baja California, Sinaloa, Sonora y Durango, con precipitaciones de hasta 280 milímetros. Las autoridades advierten a los habitantes a no bajar la guardia, y atender todas las medidas de precaución y estar alertas debido a las lluvias torrenciales que pueden provocar inundaciones y derrumbes en zonas montañosas, así como un oleaje elevado.