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El FMI eleva con fuerza la previsión de crecimiento para España este año y la deja en el 3,1%, medio punto más

  • Elogia la recuperación económica, pero ve vulnerabilidades como la deuda
  • Cree que las pensiones no se deben volver a revalorizar con el IPC
  • Pide más flexibilidad en las condiciones laborales para subir la competitividad
  • Insiste en abordar la dualidad del mercado laboral y en subir el IVA
  • Defiende que los salarios suban en línea con el incremento de la productividad
  • Respalda la resolución del Popular por eliminar "una fuente de incertidumbre"

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La directora gerente del FMI, Christine Lagarde
La directora gerente del FMI, Christine Lagarde.

El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha elevado la previsión de crecimiento para España en 2017, año en el que considera que el PIB se expandirá un 3,1%, cinco décimas más de lo que estimaba el propio organismo el pasado mes de abril, una cifra que podría ser aún mayor debido al "impulso creado por las reformas pasadas".

Así lo ha señalado en las conclusiones preliminares sobre la economía española, informe que se enmarca en el llamado Artículo IV presentado este martes en Madrid en el que ha pedido "completar" el ajuste del sector bancario, ha respaldado -sin citar el nombre de la entidad- la resolución del Banco Popular y ha defendido que las pensiones se sigan revalorizando como hasta ahora y que los salarios suban con la productividad.

La previsión de crecimiento del FMI está en línea con la realizada por el Banco de España el pasado mes de junio y es más optimista que la del Gobierno de España -que estima ahora el aumento del PIB en el 3%- y la del resto de organismos internacionales: tanto la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) como la Comisión Europea prevén que el país crezca este año un 2,8%.

En el informe, además, el FMI ha elogiado la "fuerte" recuperación económica del país, pero también ha pedido abordar en ese contexto positivo las vulnerabilidades de la economía española -sobre todo la "elevada deuda pública"- y ha señalado como "prioridades" la reducción del desempleo estructural -ha subrayado la elevada tasa de paro juvenil y de larga duración- y el aumento de la competitividad. En este sentido ha pedido una mayor flexibilidad laboral y acciones para abordar la dualidad del mercado de trabajo.

El organismo también ha mejorado su estimación para 2018 hasta el 2,5%, desde el 2,1% anterior, según ha indicado la responsable de la misión del FMI para España, Andrea Schaechter, en la rueda de prensa de presentación del documento. Allí, la responsable del Fondo ha subrayado que el crecimiento se va a ralentizar en los próximos años y que, por lo tanto, se necesitan reformas.

El FMI pide subir el IVA y los impuestos medioambientales

En su informe, el FMI asegura que España cuenta ahora con un "patrón de crecimiento más equilibrado" basado en el consumo, la inversión y las exportaciones. En este punto señala que el sector servicios, que es el que crea la mayor parte del empleo, ha jugado un papel importante porque "se ha orientado en su mayoría a la exportación, ha sustituido a un sector de la construcción de gran tamaño y, junto con la recuperación de la industria manufacturera, ha contribuido a la mejora de la balanza por cuenta corriente".

Pero para el organismo aún quedan retos. Entre ellos, destaca el alto nivel de deuda pública, que roza el 100% y que "deja poco espacio para que la política fiscal responda a los shocks" que puedan aparecer. Por eso ve necesario reducir el déficit lo antes posible -aprovechando el entorno económico positivo actual- hasta que se llegue al equilibrio estructural, lo que aceleraría la reducción de la deuda.

El Fondo ve con buenos ojos "la restricción presupuestaria prevista para 2018" porque "contribuirá de manera importante a reducir el déficit", pero señala que se debe requerir la aplicación de la regla del gasto a todos los niveles gubernamentales. Y, aunque cree que hay margen del lado del gasto -como la revisión del farmacéutico-, el organismo señala a los ingresos como la forma de reducir el déficit.

En concreto, el FMI apuesta una vez más por subir el IVA mediante la eliminación de los tipos reducidos y aumentar la recaudación procedente de los impuestos medioambientales, en línea en ambos casos con la media de la UE. El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, ya lo ha rechazado y ha asegurado, según recoge Servimedia, que "no hay ningún proyecto por parte del Gobierno que no sea bajar impuestos".

En este sentido, cuestionada por la reciente rebaja fiscal acordada por el Gobierno con Ciudadanos a cambio de respaldar el techo de gasto, la responsable de misión del Fondo en España ha subrayado que en cualquier caso debe tener presente los objetivos de déficit: "Esta medida o cualquier otra debe adoptarse en el contexto de reducción del déficit y cumplimiento de los objetivos".

Solicita más flexibilidad laboral y que los salarios suban con la productividad

El FMI destaca también en el informe la "fuerte" creación de empleo apoyada en la competitividad de los costes. "España ha llevado a cabo una reforma laboral (la de 2012) muy importante y de cara al futuro sería importante mantener esa competitividad", ha declarado Andrea Schaechter. No obstante, el Fondo señala las tasas de paro juvenil y de larga duración, que "siguen estando entre las más altas de Europa".

Además, el organismo constata que los contratos temporales siguen siendo mayores a los indefinidos y que el empleo involuntario a tiempo parcial -el subempleo- sigue siendo elevado, algo de lo que alertó también el Banco de España recientemente.

Para que haya "un mercado de trabajo dinámico y saludable que ofrezca oportunidades de empleo para todos", afirma el FMI, es importante mantener la competitividad de la economía. Y esto, en su opinión, exige dos cosas: que las condiciones de trabajo se establezcan con flexibilidad en función de las condiciones específicas de la empresa y del sector y que se aborde la dualidad del mercado de trabajo.

También solicita el Fondo políticas activas de mercado de trabajo bien diseñadas y orientadas para que los jóvenes poco cualificados y los desempleados de larga duración accedan a un empleo.

Por otro lado, los técnicos del FMI se han mostrado partidarios de vincular cualquier posible aumento de los salarios a la mejora de la productividad. Y han vuelto a defender que haya un contrato único con indemnización creciente para acabar con la dualidad del mercado laboral.

Las pensiones no deben subir con el IPC

Sobre pensiones, el FMI cree que las reformas de 2011 y 2013 garantizan "la estabilidad financiera del sistema de pensiones y los aumentos anuales de la pensión nominal para todos los pensionistas". Así, según el Fondo, "dentro de 30 años, la pensión media de un pensionista español en relación al salario medio de la economía seguiría siendo muy superior a la media prevista en la Unión Europea".

Por eso, el organismo pide la aplicación completa de las reformas y subraya que "debe evitarse" que las pensiones se vuelvan a indexar. Es decir, que no crezcan al ritmo del IPC, si no que se revaloricen con el índice actual, que según los cálculos de la autoridad fiscal independiente hará que suban un 0,25% hasta 2022. Si se quisiera cambiar esa fórmula, porque "no es socialmente aceptable", habría que "replantearlo dentro un paquete más amplio", asegura.

Además, cree que si son necesarios cambios, "la carga del ajuste debe repartirse entre generaciones y dentro de las mismas". Así que estos cambios deberían pasar por "incentivar una vida laboral más larga y fomentar el ahorro suplementario", como los planes de pensiones privados.

A este respecto, los expertos del FMI han subrayado la necesidad de que las pensiones tengan en cuenta la evolución de la esperanza de vida. "Cambiar la edad de jubilación es siempre un tema complicado y una manera de facilitarlo sería hacerlo de manera automática en función de la evolución de las expectativas de vida", ha apuntado Schaechter, tal y como recoge Europa Press.

Da su visto bueno a la resolución del Popular

El Fondo se refiere también a la resolución del Banco Popular, aunque no lo nombra, por parte de las autoridades europeas y su adjudicación al Santander. En concreto, el organismo señala que "la pronta resolución de un banco sistémico ha eliminado una fuente de incertidumbre en el sistema bancario español".

"No puedo hacer previsiones, pero lo que se ha hecho, se ha hecho bien", ha asegurado -según recoge Servimedia- durante la presentación de las conclusiones del análisis el responsable del sector financiero, Udaibir Das, en rueda de prensa, quien también ha apuntado: "No hemos visto ningún indicio de efecto sistémico de contagio ni efectos sobre los ahorradores (pero) tampoco descartamos nuevos casos".

En general, el FMI valora que el sistema financiero es ahora más fuerte que en 2012, si bien señala que los legados de la crisis "aún no han sido totalmente superados". Por eso ve necesario reducir aún más el número de activos morosos -ya que se mantienen "relativamente elevados en unos cuantos bancos, lastrando sus resultados"- y aumentar la rentabilidad de las entidades financieras.

Una forma de conseguirlo -según los funcionarios del FMI- es mediante las fusiones bancarias porque aunque creen que la reciente ronda de consolidación del sector es un avance positivo, sigue existiendo margen, según recoge Efe.

No obstante, Bas no ha querido precisar cuál sería el número óptimo de bancos, algo "muy difícil" de delimitar, ya que depende de varios factores, del tipo de negocio, del tipo de banco; lo cierto es que ahora,ha añadido, "el sector es mas eficiente".