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Resumen del año 2015 | Motor

Lorenzo - Alonso: del cielo al infierno

  • El mallorquín se ha proclamado campeón del mundo de MotoGP
  • El asturiano ha hecho la segunda peor temporada de su carrera
  • Lorenzo ya es el mejor español de la cilindrada reina, con tres coronas
  • Alonso solo ha sumado 11 puntos en su cambio a McLaren

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Este 2015 ha sido el día y la noche para Lorenzo y Alonso.
Este 2015 ha sido el día y la noche para Lorenzo y Alonso.

El motor español ha tenido un protagonista este 2015. Jorge Lorenzo se ha proclamado por tercera vez campeón del Mundo de MotoGP con su Yamaha YZR-M1 y se ha convertido en el mejor piloto del motociclismo español en la cilindrada reina.

La cruz de este 2015 ha sido para Fernando Alonso. El piloto asturiano de Fórmula 1 ha vivido su peor año en el Mundial desde que debutase con Minardi en 2001. El cambio de asiento a McLaren no le ha sentado nada bien, solo ha podido sumar 11 puntos, su segundo pero registro con un monoplaza de F1.

Lorenzo - Alonso, del cielo al infierno, en imágenes

El año de Jorge Lorenzo y Fernando Alonso resumido en imágenes

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  • El piloto español Jorge Lorenzo celebra la vistoria y el Mundial en Valencia.

    El piloto español Jorge Lorenzo celebra la vistoria y el Mundial en Valencia.

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  • Alonso deja un entrenamiento libre del Gran Premio de Formula Uno de Brasil por averías, la tónica de su 2015.

    Alonso deja un entrenamiento libre del Gran Premio de Formula Uno de Brasil por averías, la tónica de su 2015.

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La temporada del Mundial de MotoGP comenzó de manera regular para Lorenzo. El mallorquín no logró subirse al podio en las tres primeras carreras, donde se conformó dos cuartos puestos y un quinto. Jerez marcó el cambio de rumbo del piloto de Yamaha en su carrera ascendente a por la corona Mundial.

Lorenzo ganó en Jerez, Le Mans, Mugello y Motmeló de manera consecutiva y firmó su candidatura a ser el sucesor de Marc Márquez como el campeón de la categoría. Enfrente tuvo al mejor Rossi de los últimos cinco años, que le disputó el trono hasta la útlima cita de Valencia.

Sin duda, el arranque de Alonso con McLaren fue un augurio de lo que iba a ser una tortuosa temporada, con muchas decepciones y ninguna alegría. El asturiano decidió dejar Ferrari después de cinco años y regresar a McLaren para liderar un nuevo proyecto con motor Honda, que regresaba a la competición.

Alonso y su polémico accidente

Fernando Alonso tuvo un accidente en Barcelona durante la pretemporada que acabó con su ingreso en el hospital debido a una pérdida de consciencia. La polémica rodeó su choque contra el muro de protección y se llegó a hablar incluso de que se desmayó antes de impactar su bólido contra la pared.

Las consecuencias físicas derivadas del percance hicieron que Alonso se perdiera su debut en el Mundial con la escudería británica en el GP de Australia. No sería hasta la carrera de Sepang cuando Alonso debutase con el McLaren, aunque no pudo acabarla, consecuencia de los constantes problemas mecánicos que ha tenido la marca británica a lo largo de todo el año.

Para Lorenzo el paso de las carreras le iban afianzando junto a su Yamaha y el Mundial de MotoGP se convirtió en un duelo entre compañeros de equipo. A pesar de la buena racha y los triunfos, la regularidad de Rossi tenía contra las cuerdas al mallorquín, que tuvo en la cita de Misano el peor momento de la temporada. Una caída y el quinto puesto de Rossi le hizo temer por el Mundial y se tuvo que poner a luchar a contracorriente.

La patada de Rossi marca el tramo final

Pero sin duda, la acción que marcó el año se produjo en la penúltima carrera, en Sepang. Con Pedrosa en cabeza y Lorenzo segundo, Marc Márquez se enzarzó en una lucha con Rossi que acabó con el de Cervera por los suelos tras una patada del italianoo.

El pique venía de la previa, donde 'Il Dottore' intentó jugar su baza psicológica y acusó a Márquez de ayudar a Lorenzo en la lucha por el Mundial. La acción acarreó una sanción para el italiano, que tenía que salir en la última posición en Cheste.

El castigo hizo que Rossi se despidiese del Mundial casi antes de haber empezado la carrera. El italiano realizó una espectacular remontada hasta la cuarta posición, pero ya no dependía de él. Lorenzo debía terminar en el tercer puesto para que Valentino fuese campeón, pero el mallorquín no cedió y se llevó la carrera y la corona de Valencia.

Además del Mundial, Jorge Lorenzo acabó el año en MotoGP como el piloto con más carreras ganadas, siete, y con pleno de victorias en las cuatro carreras disputadas en España: Jerez, Montmeló, Motorland y Cheste.

Alonso se situó en el extremo contrario con su McLaren en el Mundial de Fórmula Uno, donde no pudo acabar en ocho carreras y no puntuó en otras nueve de los 19 Grandes Premios de los que se compone la competición.

El asturiano vivió su particular momento de gloria en la alocada cita de Hungría, donde los astros se alinearon para que acabase en quinto lugar, su mejor posición del año. En el GP anterior, el de Gran Bretaña, hizo su primer punto con el McLaren.

Lorenzo, en el olimpo del motociclismo

La corona de Jorge le permite ocupar la octava posición en el ranking histórico de la categoría de MotoGP, con tres Mudniales, e iguala a los míticos pilotos estadounidenses Kenny Roberts y Wayne Rainey.

Por edad y ganas, el mallorquín tiene a mano igualar los cuatro de Geoff Duke, Eddie Lawson y Mike Hailwood, e incluso siendo un poco más ambicioso, podría alcanzar los cinco del inolvidable Mick Doohan. El tiempo dará la respuesta.

Peor balance puede hacer Fernando Alonso, en su segundo peor año como profesional de la Fórmula uno, solo superado por su debut en el Mundial con Minardi, en 2001, cuando no logró ni un solo punto.

El 2016 deja panoramas bastantes dispares en el camino de ambos. Lorenzo afrontará el nuevo año como campeón de MotoGP y con la intención de mantaner el cetro para sumar el cuarto Mundial de la cilindrada reina en su currículo.

Mientras, Alonso, a sus 34 años, tendrá que seguir con la evolución de un coche lento y poco fiable en un intento de aspirar a acabar más carreas con posibilidades de entrar en los puntos, un panorama desolador para un bicampeón del Mundo.