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Tomizawa, adiós a la promesa del motociclismo japonés

  • El piloto de Moto2 fallece después de un accidente en Misano
  • Fue el primer vencedor de la nueva categoría del Mundial

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Shoya Tomizawa, nacido en la ciudad japonesa de Asahi el 10 de diciembre de 1990, era a sus 19 años uno de los pilotos con más futuro del Mundial en el segundo año en el que disputaba todas las carreras del campeonato. De hecho, este año había comenzado a despuntar y fue el primer líder de la recién estrenada categoría de Moto2.

Realizó un brillante comienzo de temporada con su primer y único triunfo en el primer Gran Premio del año, disputado en Qatar, y logró el segundo puesto en la segunda carrera, disputada en Jerez. La inexperiencia y la irregularidad le apearon de la lucha por el Mundial demasiado pronto, pero apuntó maneras como uno de los posibles favoritos de cara al próximo año y una de las promesas del motociclismo japonés.

El nipón comenzó su andadura con tan sólo tres años y, con 15, debutó en el campeonato japonés de velocidad. Después de quedar segundo en la clasificación general y ganar el premio al Novato del Año en la categoría de 125 cc en 2006, Tomizawa compitió tanto en la categorías de 125 cc y 250 cc del año siguiente. En su tercera temporada, en 2008, se concentró exclusivamente en la categoría del cuarto de litro, y terminó segundo.

Su trabajo le valió las invitaciones en el Gran Premio de Japón en la categoría de 12 5cc en 2006 y 2007. En 2008 participó en 250 cc, lo que despertó el interés del equipo de CIP MOTO, que le permitió poder disputar el Mundial completo del año 2009 en el cuarto de litro. En la temporada de su debut, logró su mejor clasificación con un décimo puesto en Motegi y Valencia.

Sin embargo, este año fue el de su despegue y, de la mano del equipo Technomag-CIP se consolidó como uno de los pilotos con más futuro de la parrilla y ya se apuntaba su posible salto a la categoría de MotoGP. De hecho, su sueño en la categoría reina era lucir el número 74 en su moto en homenaje a su compatriota Daijiro Katoh, que hasta la fecha era el último piloto fallecido en el Mundial.