Vicco versiona "Me muero" de la Quinta Estación en That's My Jam: ¡así fueron el resto de actuaciones del karaoke imposible!
- Vicco emociona, Grison sorprende, Bustamante dramatiza y Aníbal Gómez desata la verbena en un show musical increíble
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Cuarta entrega de That’s my jam y cuarta noche de música desatada. Arturo Valls capitanea un programa que ya se ha convertido en una cita imprescindible para quienes disfrutan viendo a artistas fuera de su zona de confort, metidos en pruebas que exigen tanto sentido del humor como talento. En esta edición, las versiones imposibles volvieron a ser las protagonistas, con resultados tan desconcertantes como brillantes.
Vicco convierte el pop-rock de La Quinta Estación en un lamento R&B
El momento más celebrado de la noche fue, sin duda, la actuación de Vicco, que se enfrentó al reto “A mi manera”. Le tocó interpretar Me muero, el éxito de La Quinta Estación, pero pasado por el filtro del R&B más elegante. La catalana se adueñó del escenario con una versión íntima, sensual y rítmica, en la que las melodías se estiraban y los silencios hablaban. Lo que en su origen era un tema desgarrado de desamor se convirtió en un lamento suave, lleno de matices y atmósfera. Una actuación que, por inesperada, se ganó la ovación más sentida de la noche.
Grison transforma “Seven Nation Army” en un soul de otra dimensión
Grison abrió la noche con su habitual mezcla de desparpajo y virtuosismo vocal. Le tocó el mismo reto que a Vicco, “A mi manera”, y la canción a reinventar fue el archiconocido Seven Nation Army de The White Stripes. Pero en lugar de riff de guitarra, lo que salió por los altavoces fue una versión soul con groove, falsete y beatbox a lo Marvin Gaye. Grison está que se sale. Solo tenéis que verlo.
Bustamante se pone la chaqueta de Luis Miguel para cantar “La cosa más bella”
David Bustamante tuvo que enfrentarse a uno de los retos más temidos del programa: el “Cover Lover”, que consiste en cantar una canción conocida al estilo de otro artista. En su caso, La cosa más bella de Eros Ramazzotti con la voz, los giros y el dramatismo de Luis Miguel. El resultado fue una versión bolero, intensa, llena de miradas seductoras. Bustamante no solo aceptó el reto, lo convirtió en un homenaje con todo el brillo (y el vibrato) del cantante mexicano.
Aníbal Gómez lleva “The Final Countdown” al terreno del pasodoble
El broche final de la noche lo puso Aníbal Gómez, que volvió a demostrar que no hay canción ni estilo que se le resista. Su misión era transformar It’s the Final Countdown de Europe en un pasodoble castizo. Y lo hizo. Con redoble de tambores, teatralidad de plaza de toros y coreografía de verbena, el cómico manchego convirtió el himno del rock ochentero en una pieza que podría sonar en las fiestas de cualquier pueblo. Lo mejor: el entusiasmo con el que lo defendió y el baile con señora del público incluido.
