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Alejandro Sanz, al borde del embargo

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Corazón - Alejandro Sanz, al borde del embargo

La sombra del embargo amenaza a Alejandro Sanz. Según publican varios medios de Florida, una empresa ha solicitado el embargo de su lujosa casa en Miami, la cual habría intentar vender sin éxito.

Al parecer, el cantante pidió más de seis millones de euros en su día para poder comprarla. Hasta la fecha, siempre había pagado el préstamo, pero la compañía alega que ha dejado de hacerlo y reclama la devolución del dinero o el embargo de la vivienda.

Buen momento musical y personal

Este traspiés desentona con su buen momento musical, pues acaba de ganar un Grammy al mejor disco de pop latino por “#Eldisco”, premio que no pudo recoger en persona al no poder asistir a la gala.

En el plano personal, desde este verano se le relaciona con Raquel Valdés,  una joven de 30 años, artista plástica y modelo, de origen cubano. No han hecho apariciones oficiales, aunque Sanz tuvo que pedirles a los medios en septiembre que dejaran de buscarle novia, ya que muchos medios publicaron que el español ya no escondía su amor por Rachel. Lo cierto es que habían confundido a la nueva pareja del artista con otra mujer: Andreína Schutte, su mano derecha.

Más problemas económicos.

Pero Alejandro tiene más frentes abiertos. En el plano sentimental, está inmerso en su separación de Raquel Perera, y en la gestión de las cuentas de su empresa, algo que está bastante relacionado.

La salud financiera de la empresa con la que maneja su carrera, Gazul Producciones, está bajo la lupa. Según el portal económico Cinco Días, su auditor alerta de la desaparición injustificada de quince millones de euros de las cuentas correspondientes a 2016, presentadas en el registro mercantil con casi tres años de retraso.

No es el único susto. A finales de verano, el cantante y su sociedad fueron condenados a pagar casi cinco millones y medio de euros a su exrepresentante por ruptura injustificada del contrato. Una crisis que Alejandro oficializó en mayo de 2016, tras una auditoría que descubrió presuntas irregularidades económicas. Un año después, Raquel Perera asumía los cargos de Presidente, consejo, apoderado, director comercial, director financiero y gerente de la empresa. La representante de Sanz durante 25 años le demandó en 2017 y le pedía 9 millones. Finalmente tuvo que pagar una cantidad menor.