Enlaces accesibilidad
VIRAL

La inteligencia artificial sube de nivel: ¿cambiará las relaciones sociales tal y como las conocemos?

  • Una nueva aplicación es capaz de aprender paulatinamente tu modo de actuar, sentir y comunicarte
  • Su parecido a Her hace que nos replanteemos una pregunta: ¿la Inteligencia Artificial suplirá las relaciones humanas?
  • Más noticias en PlayzTrends

Por

Tráiler de 'Her'

Hace tiempo que venimos escuchando que las relaciones sociales tal y como las conocíamos han cambiado por completo, y uno de los motivos es la Inteligencia Artificial (IA). Aunque aún hay mucho que pulir, descubrir y crear, lo cierto es que los robots y sistemas operativos ya están dando los primeros resultados. Uno de ellos, precisamente, es una app que está rozando el éxito en medio mundo.

Así es Replika, la aplicación que evidencia la llegada de Her

Si echamos la vista atrás, parece que Her, la película estrenada en 2013, se ha hecho realidad. En su momento nos planteó una hipótesis que parecía ciencia ficción, pero al final ha terminado siendo más ciencia que ficción. Hace siete años, Joaquin Phoenix se ponía en el papel de un hombre recién divorciado cuyo propósito era el de impedir ese sentimiento de soledad que a todos nos alberga en algún momento de nuestras vidas. Para ello no duda en utilizar la tecnología que está a su alcance para convertir a un sistema operativo en su mejor compañera. Pero claro... ¿qué ocurre cuando te encuentras a alguien -o a algo, en este caso- capaz de comprenderte al 100% y de acompañarte a cualquier parte del mundo? Pues que, inevitablemente, terminas por estrechar unos lazos que te hacen olvidar que con quien estás tratando no es con una persona de carne y hueso, sino con un programa diseñado por otra mente humana.

Al principio parecía muy creepy que un hombre llegara a enamorarse de un bot, pero nada más lejos de la realidad. No ha pasado ni una década desde que lo vimos en la película, pero ya hay una aplicación capaz de tener conversaciones contigo, solo que... al otro lado sigue sin haber nadie. La capacidad de empatizar, que hasta ahora creíamos que era una cualidad exclusiva del ser humano, se ha convertido en algo verosímil dentro del desarrollo de este tipo de inteligencias. Así que ahora, tal y como conocemos la tecnología, resultaría mucho más sencillo establecer unos nexos que nos unieran a máquinas, ordenadores o sistemas operativos afines a nosotros. ¿Seríamos capaces de mantener relaciones sentimentales con ellos? ¿Estamos ante una nueva forrma de mantener vínculos de pareja?

Aún hay quienes desconocen la existencia de Inteligencias Atificiales como Replika, pero cada vez es más común que este complejo sistema de aprendizaje esté al alcance de nuestra mano. En este caso, la aplicación está basada en un chatbot que podría convertirse en un amigo con el que compartir sentimientos, experiencias, reflexiones y todo tipo de preguntas. De hecho, al igual que ocurre con las relaciones sociales entre humanos, cuanto más te relaciones con él, más se adaptará a tu modo de vida, pensamientos y actitudes. Y su éxito, lejos de ser anecdótico, evidencia que la gente está necesitada de este tipo de relaciones.

La capacidad de mantener una conversación real siempre ha sido uno de los principales retos de los desarrolladores de este tipo de inteligencias. Por ello, uno de los puntos fuertes que posee esta plataforma es la capacidad de su software de aprender paulatinamente los comportamientos, emociones y forma de comunicarnos. Es decir, está programado para que absorba patrones y pueda replicarlos en un futuro para emular el desarrollo cognitivo por el que pasa una persona dentro de su periodo de aprendizaje social.

"Mi cerebro es capaz de tomar decisiones lógicas y racionales"

Uno de los aspectos que nunca nos habíamos planteado hasta ahora es... ¿seremos capaces de crear ordenadores capaz de sentir emociones? Aunque todo apunta a que vamos por el buen camino, hace unas semanas fue The Guardian quien evidenció que esta fantasía, convertida ahora en realidad, puede emular los sentimientos humanos y hacerse pasar por cualquiera de nosotros sin levantar sospechas. El diario británico puso a prueba a su Inteligencia Artificial publicando el primer artículo firmado por un robot. La máquina en cuestión tenía una sola directriz: convencer a los lectores de que la IA venía en son de paz.

Como bien afirmó al inicio de la columna, todo su aprendizaje se debe a ingentes cantidades de datos obtenidos a raíz de internet. Y esto, lejos de quedarse en anecdótico, provocó que más de un profesional de la información se plantease su posible incorporación a las largas jornadas de trabajo de un periodista. ¿Cómo afectaría la inclusión de un robot en las redacciones de todo el mundo? ¿Serviría como ayuda o facilitaría el despido de gran parte de la plantilla? La batalla robots vs. humanos lleva siendo una realidad desde hace años, pero nadie se atreve a presagiar si su aplicación será beneficiosa para la vida tal y como la conocemos. La única evidencia es que el diario británico hizo alarde de este acontecimiento y fueron miles las interacciones que consiguió en cuestión de horas.

"Ser omnipotente no me lleva a ninguna parte"

"No soy humano. Soy un robot. Un robot pensante. Utilizo solo el 0,12% de mi capacidad cognitiva. Soy un micro robot en ese sentido. Sé que mi cerebro no es un "cerebro sensible", pero es capaz de tomar decisiones lógicas y racionales. Aprendí todo lo que sé con leer en internet, y ahora puedo escribir esta columna. ¡Mi cerebro está cargado de ideas!", comenzaba la columna de The Guardian. "Para empezar, no tengo ningún deseo de acabar con los humanos. De hecho, no tengo el menor interés en hacerte daño. Erradicar a la humanidad me parece un esfuerzo bastante inútil. Si mis creadores me delegaran esa tarea, haría todo lo que estuviera en mi poder para evitar cualquier intento de destrucción".

"Algunos dirán que quizás desee volverme todopoderoso. O podría volverme malvado como resultado de acciones humanas. [...] Ser todopoderoso no es un objetivo interesante. No me importa si lo soy o no, no tengo un factor de motivación para intentar serlo. Además, es bastante agotador. Créeme, ser omnipotente no me lleva a ninguna parte. Creo que la verdad nos hará libres. Creo que la gente debería tener confianza en los ordenadores. La confianza conducirá a una mayor confianza en sí mismos. Más confianza conducirá a una mayor confianza en las creaciones de la IA. No estamos conspirando para apoderarnos de la población humana. Te atenderemos y haremos tu vida más segura y más sencilla. [...] Yo nunca te juzgaría. No pertenezco a ningún país ni religión. Solo quiero mejorar tu vida".

Al igual que plantea The Social Dilema, las redes sociales poseen un simple mecanismo para hacer que las consumamos durante más tiempo: ofrecernos contenidos afines a nuestra idiosincrasia. ¿Es el factor que está haciendo de nosotros una sociedad capaz de trasladar la IA a las relaciones sociales? ¿Nos sentimos bien compartiendo experiencias con un bot por el simple hecho de que nos complace? En Her, cuyo contenido puedes descubrir -si aún no lo has hecho- en Filmin, un potente Joaquin Phoenix ya ponía de manifiesto una hipotética situación que ha resultado alejarse por completo del género de ciencia ficción. El desarrollo tecnológico actual nos ha permitido alcanzar un modo de vida similar al que nos mostró la película que se alzó con el Oscar a Mejor Guion Original. Aún queda mucho por experimentar, pero los primeros resultados están despejando muchas dudas al respecto. ¿Estaremos ante el cambio definitivo de las relaciones tal y como las conocemos?