España enviará un buque para asistir a la flotilla rumbo a Gaza tras ser objeto de ataques
- El objetivo es garantizar la seguridad de los participantes y, en caso necesario, intervenir en labores de rescate
- El presidente Pedro Sánchez ha señalado que España defiende "con coherencia" la aplicación de las normas internacionales
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha confirmado que España enviará de forma inmediata un buque de acción marítima desde Cartagena hacia la costa de Israel para proteger y asistir a la Flotilla Global Sumud, compuesta por activistas y ciudadanos europeos que viajan para brindar ayuda humanitaria a la población gazatí. El objetivo, según ha señalado, es garantizar la seguridad de los participantes y, en caso necesario, intervenir en labores de rescate.
"España exige que se cumpla la ley internacional y que se respete el derecho de nuestros ciudadanos a navegar por el Mediterráneo en condiciones de seguridad", ha afirmado Sánchez durante una comparecencia en Nueva York, donde participa en la Asamblea General de Naciones Unidas. Allí ha reiterado que España defiende "con coherencia" la aplicación de las normas internacionales "en todos los lugares y en todo momento, sea Ucrania, sea Gaza", advirtiendo contra el uso de "varas de doble medir".
Desde el Gobierno, la vicepresidenta segunda, Yolanda Diaz, ha reafirmado en Bluesky la necesaria protección de la Flotilla, a la que ha calificado como "un rayo de esperanza que debemos proteger".
El anuncio ha llegado un día después de que Italia comunicara el envío de una fragata a la zona para acompañar a la Flotilla tras ser esta objeto de ataques. La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, ha asegurado que no está previsto que el buque emplee la fuerza en las labores de asistencia. En esta línea, Sánchez ha subrayado que la misión del buque es estrictamente de protección y apoyo humanitario frente a los riesgos que puedan enfrentar los barcos en su trayecto.
El Ministerio de Exteriores israelí ha propuesto a la que ha denominado como "flotilla Hamás-Sumud" a "descargar cualquier ayuda que puedan tener en cualquier puerto de un país cercano fuera de Israel, desde donde pueda ser transferida pacíficamente a Gaza".
El ministerio ha reiterado que Israel no permitirá que "ningún buque entre en una zona de combate activo ni permitirá la violación de un bloqueo naval legal".
Albares reitera la protección del Gobierno a los españoles de la Flotilla
Desde la Asamblea General de la ONU en Nueva York, el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, ha subrayado que los ciudadanos españoles que participan en la iniciativa "tienen toda la protección diplomática y consular del Estado".
Albares también ha calificado de "inaceptables" los ataques contra los barcos de la flotilla y ha ordenado que cesen de inmediato, al recalcar que "no son una amenaza para Israel ni para nadie, sino que viajan con un fin estrictamente humanitario".
Sánchez ha aprovechado su paso por la ONU para insistir en el reconocimiento del Estado de Palestina, decisión que España adoptó en 2024 y que, recordó, ya empieza a abrir camino en la comunidad internacional. "Palestina debe tener plenos derechos en la sociedad internacional", ha defendido, al tiempo que ha reclamado una solución política definitiva basada en los dos Estados y el fin de la masacre en Gaza.
Italia envía otro buque
El Gobierno italiano ha anunciado que seguirá los mismos pasos. Roma ha enviado un buque de la armada para asistir a la flotilla después de que las embarcaciones fueran atacadas.
Sin embargo, a propuesta de la primera ministra italiana, Georgia Meloni, es que los activistas propalestinos entreguen la ayuda en Chipre al Patriarcado Latino de Jerusalén, que luego la repartiría en el enclave.
"Es una propuesta que parece contar con el apoyo del gobierno chipriota, el gobierno israelí y, por supuesto, el gobierno italiano. Estamos esperando una respuesta de la flotilla", ha declarado Meloni a la prensa en Nueva York, donde asiste a la Asamblea General de la ONU. La líder ultraderechista, aliada de Tel Aviv, ha pedido a la flotilla que acepte su plan y ha criticado su iniciativa, calificándola de "gratuita, peligrosa e irresponsable".
