Nuevo altercado en el Congreso con otro agitador ultra que revienta la rueda de prensa de Sumar
- Un asistente se ha saltado el turno establecido por los periodistas acreditados y ha detenido a gritos la intervención
- Barbero ya sufrió una situación similar hace menos de un mes, cuando Bertrand Ndongo boicoteó su rueda de prensa
Un nuevo altercado en la sala de prensa del Congreso ha obligado a concluir antes de tiempo la rueda de prensa de la portavoz de Sumar, Verónica M. Barbero. Durante la ronda de preguntas, un asistente se ha saltado el turno establecido por los periodistas acreditados y ha interrumpido a gritos la intervención de una de las compañeras parlamentarias.
Pese a que los trabajadores le han pedido que respete el orden, el hombre se ha quejado de la espera y ha acusado a la diputada de Sumar de solo responder "a sus amiguitos". "Amiguitos no, periodistas. Es la diferencia, fíjese usted", le ha contestado Barbero, que ha tenido que dar por terminada la comparecencia tras pedirle que no levante la voz.
Periodistas y diputados piden medidas
Barbero ya sufrió una situación similar hace menos de un mes, cuando el agitador de ultraderecha y con acreditación de prensa en el Congreso de los Diputados, Bertrand Ndongo boicoteó su rueda de prensa. Pese a que le pidieron respeto, siguió increpando e impidiendo a los medios acreditados poder desempeñar su función con normalidad, por lo que los periodistas decidieron no asistir al resto de ruedas de prensa de los portavoces de ese día.
Tras esta situación, el pleno aprobó con 176 votos a favor y 170 en contra la toma en consideración de la reforma del reglamento de la Cámara para establecer normas de comportamiento y sancionar a los medios de comunicación y periodistas que se salten las normas.
La portavoz de Sumar defendió la necesidad de prohibir la entrada de "acosadores ultra que se hacen pasar por comunicadores" para que "se proteja el derecho a informar". El PP, sin embargo, lamentó que "los políticos pretendan controlar lo que hacen los periodistas" de la Cámara y tachó la reforma del reglamento como una forma de "acallar a los medios de comunicación que son incómodos para el Gobierno".
En febrero, la Asociación de Periodistas Parlamentarios (APP) leyó un manifiesto en defensa de los informadores, que sufren "descalificaciones, insultos y señalamientos" en el Congreso de los Diputados por parte de otros acreditados. "Incluso nos amenazan con dar a conocer nuestros domicilios", declararon.
Según la APP, varias "personas acreditadas" en el Congreso no siguen "unas elementales normas de convivencia", dificultando el trabajo de los profesionales de la información y perturbando "el clima de respeto que debe presidir la necesaria relación con los políticos". "Ese comportamiento repercute directa y negativamente en el derecho constitucional a la información que tiene la ciudadanía", agregaron.