En el corazón de la Organización Nacional de Trasplantes: "Nuestro objetivo es salvar el mayor número de vidas"
- Un equipo de enfermería trabaja los 365 del año para emparejar órganos donados con pacientes que esperan un trasplante
- El año pasado se hicieron 6.464 trasplantes gracias a los más de 2.500 donantes
En un antiguo hospital para tuberculosos, en Madrid, cerca de las Cuatro Torres, se encuentra la sede de la Organización Nacional de Trasplantes (ONT). Lo que en su tiempo sirvió para sanar, hoy es el centro desde donde se coordinan todas las donaciones de órganos de España.
Y es un trabajo que requiere tener a un grupo de enfermería presente las 24 horas del día, los 365 días del año. Hoy es Itziar la que hace la guardia completa: "Estamos ayudando a salvar la vida de una persona, por eso es tan importante que se trasplanten los órganos en las mejores condiciones. Nuestro objetivo es que se salven el mayor número de vidas". Pero no está sola, a Itziar le acompañan cuatro enfermeras más.
El teléfono no para de sonar. Es el runrún continuo durante todo el día. Félix, que ha entrado a las nueve de la mañana, está organizando una donación compleja. Es una persona que ha fallecido por eutanasia. Desde que se aprobó, 130 personas que han muerto así han donado sus órganos. En el caso en el que está trabajando Félix, son cinco: el corazón, el páncreas, el hígado, los riñones y los pulmones. Además de estos cinco, una persona, al fallecer, puede donar también el estómago, los intestinos y los tejidos.
Si se dona todo, se pueden beneficiar más de nueve receptores. Todo este trabajo se tiene que hacer en el menor tiempo posible, y es que los órganos tienen un periodo de isquemia, es decir, las horas que duran en el cuerpo una vez fallecido. El que más aguanta es el riñón, hasta 24 horas. Los que menos, el corazón, cuatro, y los pulmones, seis. "Hay que organizar todo en tres o cuatro horas. No es lo mismo trasplantar un órgano a la hora que a las ocho", insiste Félix.
En 2024, en España, 2.562 personas donaron sus órganos. Un acto altruista y anónimo que permitió realizar 6.464 trasplantes. Una cifra jamás alcanzada. De hecho, el año pasado, se alcanzó la tasa de 52,6 donantes por millón. El objetivo era superar los 50 al principio de esta década, pero la pandemia de Covid lo frustró. En 2019 se alcanzaron los 49 donantes por millón, pero en 2020 cayó hasta los 37,4.
Eso sí, en solo cinco años se ha superado este objetivo, gracias, insisten desde la ONT, a la solidaridad de los ciudadanos. El año pasado, el 82% de los candidatos a donar dijeron que sí. De media, ocho donaciones al día.
“"Hay que organizar todo en tres o cuatro horas. No es lo mismo trasplantar un órgano a la hora que a las ocho", insiste Félix.“
Itziar recuerda que aunque el trabajo se centraliza en la ONT, "la donación y el trasplante es un proceso de todos. Nosotros desde aquí lo gestionamos, pero es gracias a que el resto funciona, y lo hace muy bien". En cada trasplante participan en torno al centenar de personas: personal sanitario, pero también, en ocasiones, conductores de ambulancias, controladores aéreos o pilotos. Porque en este sistema, nacional, los órganos se pueden enviar de un hospital a otro. Si la distancia es menos de 300 kilómetros, se suele hacer por carretera. Si los supera, en avión. "Si tenemos que utilizar el aeropuerto de Badajoz a las 3 de la mañana, tenemos acceso a llamarles para decirles que tenemos un vuelo trasplante y los aeropuertos nos abren", reconoce, orgullosa, Itziar.
“ "La donación y el trasplante es un proceso de todos", asegura Itziar“
Un trabajo colectivo, insisten, que permite a España desde hace 33 años ser líderes mundiales en donación de órganos. Itziar, veterana en la ONT, resume así su trabajo: "El saber que cuando un coordinador te da los datos de un paciente que quiere ser donante y ser capaz con todo el trabajo de saber que hay cuatro, cinco o seis receptores que se van a poder salvar, es lo más gratificante de todo el proceso".