Mónica García avisa de que con "el genocidio no se comercia, no se pacta y no se negocia"
- Así lo ha dicho ministra tras una semana marcada por el polémico contrato con una empresa de Israel para la compra de balas
- Llama "indigno" a Mazón por la gestión de la dana, que cumple seis meses el próximo martes
La ministra de Sanidad, Mónica García, ha advertido de que "con el genocidio no se comercia, no se pacta y no se negocia" y ha trasladado su solidaridad con el pueblo palestino, que supera los 50.000 muertos desde el inicio de la guerra entre Israel y Hamás.
"Nosotras lo decimos alto y claro, las veces que haga falta: Con el genocidio no se comercia, no se pacta y no se negocia", ha advertido la también líder de Más Madrid, después de una semana marcada por el polémico contrato con una empresa de Israel para la compra de balas, que abrió una crisis en el Gobierno de coalición.
Durante su intervención en el Plenario Autonómico Extraordinario de Más Madrid, García se ha mostrado, además, muy orgullosa de haber coordinado la evacuación de niños y niñas palestinos para tratarse en España de distintas patologías y heridas, y que puedan recuperaran su dignidad, su humanidad y su vida.
La ministra pide la dimisión de Mazón por la dana
Sobre la tragedia de la dana, de la que se cumplen ahora seis meses, la ministra ha denunciado la gestión del presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón. "No se puede ser más indigno y no se puede ser más sinvergüenza", ha dicho tras sumarse al grito de "Mazón, dimisión".
Ha defendido que la política es "un oficio noble", pero ha asegurado que también hay "un oficio absolutamente indigno que es el que constantemente nos recuerda el PP" en la figura de Mazón.
García ha tenido, asimismo, palabras de condolencias por la muerte del papa Francisco, que ya ha sido enterrado este sábado. La ministra considera que el pontífice ha sido "vilipendiado e insultado" por personas como la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, o el líder de Vox, Santiago Abascal, por hablar de cuestiones como la justicia social, los pobres, las personas vulnerables o las minorías.
"Se ha convertido en un enemigo de la derecha y de la ultraderecha reaccionaria de todo el mundo solamente por poner encima de la mesa la justicia social", ha lamentado. "Si estos son los enemigos de la derecha y la ultraderecha reaccionaria, aquí tienen a muchísimos más enemigos", ha añadido.