Junts descarta sumarse a una moción de censura en Ripoll para desbancar al Gobierno de ultraderecha de Orriols
- El portavoz de ERC, Gabriel Rufián, critica que la formación independentista frene la alternativa que planteaban
- Desde el PSC lo califican de error y acusan a Junts de adaptarse a la extrema derecha
Junts se ha desmarcado este martes de una moción de censura contra la alcaldesa de Ripoll (Girona), Sílvia Orriols, la líder de la formación de extrema derecha independentista Aliança Catalana. De esta manera, el partido de Carles Puigdemont frustra la mayoría que haría posible que esta iniciativa, a la que se sumaba ERC, el PSC y la CUP, salga adelante.
La formación independentista junto a ERC y PSC suman ocho concejales frente a los seis de Aliança Catalana, mientras que CUP cuenta con dos y Som-hi Ripoll, con uno. Tras varios días de especulaciones en torno al pacto a cuatro, Junts ha roto la baraja a través de un comunicado de la dirección de Junts y de la agrupación local de Ripoll, en el que alega que "no es viable sustituir un Gobierno en minoría por otro, porque está el riesgo de que la ciudadanía crea que se trata de un simple cambio de sillas". De este modo, la formación apuesta por construir una alternativa sólida y ganar a los discursos de odio en las urnas.
El encargado de hablar en nombre de los tres ediles ha sido el concejal Ferran Raigon, que ha negado la existencia de un pacto previo para esta moción de censura y que ha apostado por "validar en las urnas una alternativa al gobierno de Orriols" a partir de 2027, cuando se celebrarán las próximas elecciones municipales, y no a través de pactos que se articulen "en los despachos".
El pasado enero, Orriols se sometió a una moción de confianza después de que le tumbasen los presupuestos, la perdió y se abrió un plazo de un mes para que la oposición conformase un bloque con mayoría suficiente como para forzar el relevo del equipo de gobierno.
El secretario general de Junts, Jordi Turull, ha comparecido en rueda de prensa en Ripoll para dar apoyo a los concejales de la localidad junto al exalcalde Jordi Munell y el diputado en el Parlament Salvador Vergés. En la misma ha asegurado que "el objetivo de Junts Ripoll no es sólo hacer un Consistorio alternativo, sino gobernar bien".
Por su parte, Turull ha aseverado que Junts "combatirá de forma directa y sin matices el discurso de odio". Al tiempo que ha advertido de que no aceptarán "según qué acusaciones" que reciba su formación porque, según ha concretado: "El PSC no deja de rechazar propuestas nuestras en el Parlament gracias a los votos de Vox, y en algunos casos gracias a los votos de Aliança Catalana —el partido que lidera la alcaldesa—".
El portavoz de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, se ha pronunciado al respecto en los pasillos de la Cámara Baja: "Nosotros somos antifascistas desde hace 90 años. No cambiamos de opinión. No sé si se puede ser un día antifascista y otro día no. Nosotros somos antifascistas tengan una estelada o una 'rojigualda'".
Rechaza consolidar una alternativa
A criterio de Junts, una moción de censura "aumentaría el riesgo de que la alcaldesa aumente su victimismo y azuce una confrontación social de difícil reconducción, al menos a corto plazo".
Los de Puigdemont consideran que "la alternativa que surja a la alcaldesa debe ser fuerte, con un gran apoyo popular", por lo que apuestan por derrotar a Orriols, "no en los despachos, sino en las urnas". Además, añaden que a "Aliança Catalana esta estrategia le interesa y no tiene ningún límite ético para conseguir su propósito".
En el comunicado, Junts acusa a Orriols de haberse instalado "en la confrontación sistemática", de haber instaurado "un régimen personalista" y de haber convertido la localidad y sus habitantes "en instrumentos de la estrategia de su partido en la campaña electoral permanente".
Críticas tras la decisión de Junts
La decisión de Junts ha generado críticas del resto de partidos implicados en la iniciativa. El jefe de filas del PSC-Units en el Parlament, Ferran Pedret, ha tachado de "grave error" la postura de la formación, a quien ha acusado de "contemporizar con la extrema derecha pensando en 2027", en alusión a las municipales, según ha expresado en un mensaje en X.
La portavoz del secretariado nacional de la CUP, Su Moreno, ha acusado a Junts de haber antepuesto sus "intereses de partido" para frenar un acuerdo que "era un consenso de toda la oposición de los partidos de Ripoll".
Por su parte, la secretaria general de ERC, Elisenda Alamany, ha asegurado que el pacto entre grupos "estaba listo" y ha atribuido la decisión de Junts al "miedo" de la cúpula de los posconvergentes: "Le han temblado las piernas ante la alcaldesa y una mala encuesta".
Alamany ha explicado que, al saber que el acuerdo peligraba, el líder de ERC, Oriol Junqueras, se ha puesto en contacto "con los máximos dirigentes de Junts" para saber si la situación se podía reconducir y que le han dicho que "la decisión ya estaba tomada" y que respondía "a una mala encuesta" interna.
La alcaldesa de Ripoll ha asegurado que "era previsible que Junts se echaría atrás por las presiones internas", en la misma línea que Alamany. La dirigente de la formación de extrema derecha ha celebrado la decisión de Junts de no sumarse a esta moción de censura. "El resumen de la jornada es que ha habido un pulso... y lo ha ganado Ripoll", ha dicho Orriols en un mensaje en X.