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Vodafone España anuncia el despido de un máximo de 1.200 empleados, una cuarta parte de su plantilla

  • Vodafone España ha justificado la medida por razones económicas y los sindicatos la rechazan "frontalmente"
  • Este es el tercer ERE que plantea la empresa de telecomunicaciones tras los efectuados en 2013 y 2015

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Logotipos de Vodafone
Logotipos de Vodafone.

Vodafone España despedirá a un máximo de 1.200 empleados, aproximadamente una cuarta parte de su plantilla actual de unos 5.100 trabajadores, mediante un procedimiento de despido colectivo que ha comunicado este jueves a los sindicatos. La empresa de telecomunicaciones justifica la medida "por razones económicas, productivas y organizativas", según una nota de prensa difundida a los medios. UGT, CC.OO. y STC rechazan "frontalmente" el ERE.

El CEO y presidente de Vodafone España, António Coimbra, ha reconocido que "es una medida difícil pero necesaria", en su opinión, para revertir la "negativa" evolución del negocio en un momento de "fuertes presiones" del mercado, según ha explicado a los trabajadores en una carta recogida por Efe.

Es el tercer Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que presenta Vodafone en los últimos seis años. El primero de ellos, presentado en enero de 2013, afectó finalmente a 900 trabajadores, de los que 620 fueron despidos. El último, a finales de 2015, implicó la salida de unos mil trabajadores tanto de Vodafone España como de Vodafone Ono.

Los detalles se cerrarán en la negociación con los sindicatos

Los detalles sobre el nuevo ERE de Vodafone -sobre si afecta a todas las divisiones o no y en qué medida- no se conocerán hasta que no se inicie la negociación con los representantes de los trabajadores, han explicado a RTVE.es fuentes de la compañía. Los sindicatos han sido convocados a finales de enero para iniciar un periodo de consultas, que se prolongará durante un mes. La firma asegura que aborda la negociación "con la determinación de alcanzar (...) el mejor acuerdo posible tanto para los empleados como para la empresa".

Vodafone argumenta que ha sufrido una caída de ingresos y del resultado bruto de explotación (EBITDA) en el primer semestre del actual ejercicio. La compañía señala que, "en el actual contexto de mercado, la demanda de servicios sigue creciendo de forma exponencial", pero no los precios. Asegura que "cerca del 50% de las altas brutas están asociadas con ofertas "low y medium cost".

Ante esta situación, la empresa de telecomunicaciones asegura que está obligada "a tener una estructura de costes preparada para competir con éxito en todos los segmentos". Quiere, añade, "un modelo organizativo más simplificado y que refuerce la coordinación y sinergias entre grupos".

Caída de los ingresos y de los clientes de televisión

Según los datos recopilados por la agencia Efe, los ingresos de Vodafone España cayeron un 3,2 %, hasta los 2.421 millones de euros en el primer semestre fiscal, lastrados por la reposición de tarifas y la guerra del fútbol, y su valor contable en el país se vio rebajado en 2.900 millones.

Además, durante el periodo de abril a septiembre de 2018 redujo su base de clientes de televisión en 98.000, de ellos 66.000 entre julio y septiembre, principalmente por la decisión de la compañía británica de no seguir comprando fútbol a Telefónica, que se hizo en junio con los contenidos de La Liga y la Champions para próximas temporadas.

No obstante, en el semestre sumó 35.000 clientes de contrato de telefonía móvil y 32.000 de fibra, aunque en este segmento hubo un descenso de 5.000 entre julio y septiembre, explica esta agencia de noticias.

Vodafone asegura que el ERE anunciado este jueves pretende revertir esta evolución, "reforzar sus sostenibilidad, proteger la capacidad de inversión y diseñar una organización más competitiva y mejor adaptada a lo que piden los clientes".

Los sindicatos rechazan "frontalmente" el nuevo ERE

Los sindicatos UGT, STC y CC.OO. han rechazado "frontalmente" el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) comunicado este jueves por la dirección de Vodafone España, a la que han acusado de querer "paliar los continuos errores de gestión y estratégicos" con recortes de plantilla, y han reclamado que no se adopten "medidas forzosas" que puedan afectar al empleo en la operadora.

En un comunicado conjunto tras la reunión celebrada con la empresa recogido por Europa Press, las organizaciones sindicales con representación han criticado que los responsables de la compañía buscan "solucionar de manera fácil su incapacidad demostrada y reiterada para la toma de decisiones estratégicas acertadas".

En concreto, han apuntado a la "mala gestión" de la compra de ONO, el proyecto "frustrado" de fusión societaria de ambas compañías, la renuncia al fútbol, el retraso en las instalaciones a clientes, el "abandono" del despliegue de fibra y la "dependencia" de Telefónica, la contratación de gran cantidad de personal a pesar de la situación y el desastre del cambio de sistemas.

"En definitiva, los continuos errores de gestión y estratégicos cometidos a lo largo de estos tres últimos años, junto con la agresiva competitividad del sector, nos han llevado a esta situación que ahora se pretende paliar principalmente reduciendo plantilla", han criticado los sindicatos.