Enlaces accesibilidad

Rechazan la oferta de Polanski para volver a EEUU y cerrar el caso de abuso sexual

  • El TS de Los Ángeles lo rechaza al basarse "en los mismos hechos"
  • Polanski argumentó que en su día llegó a un acuerdo con las autoridades
  • El cineasta está acusado de pederastia en un proceso judicial de 1978

Por
El director de cine Roman Polanski en una imagen tomada en Cracovia el 15 de enero
El director de cine Roman Polanski en una imagen de 2015

Un juez de Los Ángeles rechazó este lunes la propuesta del cineasta Roman Polanski para regresar a Estados Unidos y cerrar un antiguo caso de abuso sexual sin tener que pasar más tiempo en prisión.

El magistrado, del Tribunal Superior del condado de Los Ángeles, Scott M. Gordon, desestimó la petición de Polanski porque estaba basada, dijo, en "los mismos hechos y argumentos legales" presentados y rechazados en el pasado por otros jueces.

"No hay una base suficiente o convincente para reconsiderar estos asuntos", apuntó Gordon. Polanski está acusado de haber mantenido relaciones sexuales en 1977 con una menor de 13 años, Samantha Geimer, después de una sesión fotográfica en Los Ángeles.

Geimer acusó a Polanski, que en ese entonces tenía 43 años, de drogarla y obligarle a mantener relaciones sexuales, por lo que el director de cine fue arrestado.

Polanski se declaró culpable y pasó 42 días en la cárcel, pero estando en libertad bajo fianza y ante el temor de tener que volver a prisión para cumplir una condena mucho más severa huyó de EE.UU. a finales de 1978.

Solicitud para regresar a EEUU

El cineasta había presentado en febrero de este año una serie de documentos legales ante el tribunal de Los Ángeles para regresar a Estados Unidos y cerrar el caso siempre y cuando contara con la garantía de que no pasaría más tiempo entre rejas.

Polanski argumentó que en su día llegó a un acuerdo con las autoridades para cumplir sólo 48 días de prisión, pero que escapó del país porque el magistrado Laurence Rittenband pretendía imponerle una condena más dura de la pactada.

Sin embargo, el juez Gordon no aceptó este lunes estas alegaciones y negó, además, la petición de Polanski para ser sentenciado "in absentia" y su solicitud para conocer la opinión actual de la Fiscalía sobre su condena antes de pisar suelo estadounidense.

Este nuevo varapalo al realizador extiende un embrollo judicial que ha restringido su libertad de movimiento por todo el mundo durante años por miedo a que Estados Unidos reclamara su extradición.

En 2009, las autoridades estadounidenses solicitaron a Suiza la detención del realizador, quien tiene nacionalidad francesa y polaca.

Polanski fue arrestado en el aeropuerto de Zúrich y pasó tres meses en prisión y otros siete en arresto domiciliario, hasta que, finalmente, Suiza denegó su extradición y lo puso en libertad.

El intento más reciente de llevar a Polanski ante los tribunales se vivió en 2015 cuando Estados Unidos pidió a Polonia la extradición del artista, una solicitud que fue finalmente rechazada.