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La Iglesia Católica australiana recibe 4.500 denuncias por pederastia en 35 años

  • Las denuncias apuntan a centenares de religiosos y 93 altos cargos de la iglesia
  • El 78% de los denunciantes fueron varones, mientras que un 22%, mujeres
  • El 7% de los curas del país ha sido acusados de pederastia entre 1960 y 2010

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Francis Sullivan, director ejecutivo del Consejo de la Verdad, Justicia y Reconciliación durante la audiencia de la Comisión Real.
Francis Sullivan, director ejecutivo del Consejo de la Verdad, Justicia y Reconciliación durante la audiencia de la Comisión Real.

Un total de 4.444 personas han denunciado haber sufrido abusos sexuales siendo menores por parte de miembros de la Iglesia Católica en Australia entre 1980 y 2015, según un informe de la Comisión Real de la Respuesta del Estado al Abuso de Menores.

La abogada consejera del órgano, Gail Furness, ha explicado en la reanudación de las audiencias de la Comisión -creada originalmente con el objetivo de dar respuesta institucional a los casos de abusos sexuales infantiles que se produjeron dentro de la Iglesia Católica- que han recabado un total de 4.444 denuncias que apuntan a centenares de religiosos y 93 altos cargos de la iglesia, además de afectar a más de un millar de instituciones.

Gail Furness: "El secretismo prevaleció, al igual que los encubrimientos"

"Los niños fueron ignorados o, peor aun, castigados. Las denuncias no fueron investigadas", ha señalado la abogada Furness, que también ha criticado la gestión de estos casos por parte de la Iglesia y ha denunciado que los relatos de las víctimas son "deprimentemente similares".

Durante la sesión, la abogada también ha detallado el modus operandi de los responsables cuando descubrian un caso: "Curas y religiosos fueron reubicados. Las comunidades adonde fueron trasladados desconocían su pasado. Los documentos no fueron guardados o fueron destruidos. El secretismo prevaleció, al igual que los encubrimientos".

La abogada también ha denunciado ante la Comisión las dificultades impuestas por el Vaticano para obtener información sobre los abusos sexuales y en particular respecto al caso de un sacerdote acusado de pederastia. "La Comisión Real esperaba un mejor entendimiento sobre la acción que debería tomar en cada caso. La Santa Sede respondió el 1 de julio de 2014 que 'no era posible ni apropiado proveer la información requerida'", ha explicado Furness.

Identificados 1.880 presuntos abusadores

La comisión real tomará declaración a casi todos los obispos del país en varias vistas públicas que durarán hasta el 27 de febrero. En total, unas 1.880 personas han sido identificadas como presuntos perpetradores de abusos. De estos, 597, o el 32% eran hermanos religiosos; 572, o un 30%, sacerdotes; 543, o un 29%, laicos, y 96, o el 5%, eran hermanas religiosas, ha precisado Furness.

Los datos sugieren además que entre 1950 y 2010, más del 20% de los Hermanos Maristas, los Salesianos de Don Bosco y los Hermanos Cristianos fueron acusados de abusos sexuales, mientras que en la orden de San Juan de Dios la proporción sube a un 40,4%. En concreto, en esas seis décadas un 7% de los sacerdotes católicos -1,265- fue denunciado en algún caso de pederastia.

Los datos recopilados indican que el 78% de los denunciantes fueron varones y un 22%, mujeres. También revelaron que la edad media de las víctimas fue de 11,6 años en el caso de niños y de 10,5 en el caso de niñas, y que las víctimas tardaron una media de 33 años en presentar las denuncias después de que el supuesto delito fuera cometido.

La Iglesia Católica considera las cifras como "trágicas e indefendibles"

Francis Sullivan, director ejecutivo del Consejo de la Verdad, Justicia y Reconciliación, el organismo dedicado a coordinar la respuesta de la Iglesia Católica hacia las víctimas, calificó las cifras como "trágicas e indefendibles". "En cada entrada en este banco de datos, la mayor parte representa a un niño que sufrió a manos de alguien que debió cuidarlo y protegerlo", ha insistido Sullivan.

Este lunes se ha celebrado el primer día de una serie de audiencias en las que se abordarán las denuncias de abusos sexuales, cómo afrontó estos casos la Iglesia Católica en el pasado y cómo lo hace en el presente, entre otros asuntos. Durante estas vistas declararán seis de los siete arzobispos de Australia y líderes de las órdenes religiosas, entre ellos el arzobispo de Adelaida, Philip Wilson, considerado el más alto cargo de la jerarquía católica acusado de encubrir abusos a menores.

El arzobispo de Sídney pide perdón

El arzobispo de Sídney, Anthony Fisher, uno de los llamados a declarar, ha pedido perdón en una pastoral por el daño causado en el pasado y ha confiado en que la Iglesia Católica saldrá reforzada de este "camino de humillación". "La Iglesia lo lamenta y yo lamento los errores del pasado que dañaron a tantas personas (...). Estoy convencido de que al final de la humillación y la purgación por la que estamos pasando seremos una Iglesia más humilde, más consciente y más compasiva en este área", ha señalado el prelado.

"Pero estamos en un viaje y todavía queda mucho por hacer, por ello estamos agradecidos por el estudio concienzudo y la orientación profesional de la Comisión Real", ha añadido Fisher.

La Comisión se creó en 2012 para investigar la respuesta de las autoridades a los casos de abusos sexuales a menores cometidos en instituciones públicas, sociales, deportivas y religiosas. En estos cinco años, de 309 casos de abusos que la Comisión ha derivado a la policía australiana, se ha iniciado el proceso en un total 27 y hay 75 casos más en investigación.

El año pasado el comité presentó 99 recomendaciones a las autoridades sobre cómo atender a las víctimas, además de un plan de compensaciones de 4.000 millones de dólares australianos (3.061 millones de dólares estadounidenses o 2.845 millones de euros) financiado por los centros donde se cometieron los abusos.

El 4 de noviembre pasado, el Gobierno de Australia anunció que indemnizará a cada víctima de abusos sexuales cometidos en el seno de instituciones públicas y religiosas del país con hasta 150.000 dólares locales (114.850 dólares de EEUU o 107.000 euros).