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Binali Yildirim, el futuro jefe del Gobierno de Turquía, fiel a Erdogan

  • El actual ministro de Transportes Binali ha sido nombrado candidato único para presidir el AKP
  • Sustituirá al primer ministro Ahmet Davatoglu, que no era suficientemente fiel a Erdogan
  • Yildirim promete obediencia al presidente Erdogan y continuar con la lucha antiterrorista

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El ministro de Transporte y Comunicaciones, Binali Yildirim, vota durante un debate en el Parlamento de Ankara.
El ministro de Transporte y Comunicaciones, Binali Yildirim, vota durante un debate en el Parlamento de Ankara.

El actual ministro de Transportes y Comunicaciones de Turquía, Binali Yildirim, un político leal al presidente del país, Recep Tayyip Erdogan, ha sido nombrado este jueves candidato único para presidir el partido gubernamental AKP y sustituir al dimitido Ahmet Davutoglu como nuevo primer ministro del país, según informa la emisora CNNTürk.

Yildirim será el único nombre que el partido debata en el congreso que celebrará este domingo, por lo que no se espera que cuente con oposición para presidir el partido islamista que gobierna en Turquía desde 2002.

El Comité Ejecutivo de la formación aprobó la designación de Yildirim con el 80 % de los votos, según esa emisora.

Tras la prevista confirmación como líder del AKP el domingo, el presidente del país y fundador del partido, Recep Tayyip Erdogan, lo invitará a proponer un equipo de Gobierno que será sometido al voto de confianza del Parlamento, donde el AKP tiene mayoría absoluta.

Un hombre de confianza de Erdogan

Yildirim, nacido en 1955, es uno de los hombres de confianza de Erdogan, que sigue siendo el hombre fuerte del AKP pese a haber abandonado la presidencia del partido y del Gobierno en 2014, cuando fue elegido jefe del Estado.

De hecho, la dimisión de Davutoglu se ha producido debido a la presión de Erdogan, al considerar que no le era suficientemente fiel. Según el diario Sabah, cercano a Erdogan, el protagonismo de Davutoglu en la política turca y su buena imagen en el extranjero desembocaron en una lucha de poder interna.

El primer ministro turco, Ahmed Davutoglu, dejará el cargo tras perder la batalla interna con Erdogan.

Esa situación dio al traste con la fórmula "un presidente fuerte y un primer ministro fuerte", consigna lanzada hace dos años a favor del novedoso papel activo del presidente, ideado por Erdogan.

En cualquier caso, los analistas consideran que es irrelevante quién ocupe la jefatura del partido y del Ejecutivo, ya que Erdogan seguirá siendo quien maneje los hilos del poder.

La elección de Yildirim parece amoldarse al deseo de contar con un primer ministro "de perfil bajo", dejando todo el protagonismo a Erdogan, en una inversión de los roles políticos tradicionales en Turquía, donde el presidente se ha limitado a funciones representativas y ha mantenido una postura equidistante hacia los partidos.

Aunque fue cofundador del AKP y ministro de Transportes y Comunicaciones de forma casi ininterrumpida entre 2002 y 2013 (y nuevamente desde noviembre pasado), Yildirim nunca ha asumido un perfil público destacado. En las últimas elecciones municipales, en 2014, fue candidato por el AKP a la Alcaldía de la ciudad de Esmirna, pero perdió ante el actual alcalde, del partido socialdemócrata CHP.

Trabajador, leal y discreto: así es el próximo primer ministro turco

Nacido el 20 de diciembre de 1955 en Erzincan, en la provincia de Anatolia oriental, estudió ingeniería naval en Estambul y tiene fama de ser hombre trabajador y, sobre todo, de inquebrantable lealtad a Erdogan.

Tampoco se le conocen opciones ideológicas divergentes de la línea conservadora del partido y es notorio que su esposa, como es frecuente en el AKP, lleva el pañuelo islamista.

A la cartera de Yildirim, que domina el inglés y el francés, pertenecen los grandes proyectos de infraestructuras, como el tren de alta velocidad o la línea submarina Marmaray. También se cuentan tres grandes proyectos aún en obras y con los que el AKP exhibe su labor de modernización de Turquía: el puente sobre el Golfo de Izmit, el tercer puente del Bósforo y el tercer aeropuerto de Estambul.

Las intervenciones breves y el hablar pausado y monótono de Yildirim ofrecen un fuerte contraste a los discursos encendidos de Erdogan, que Davutoglu llegó a emular con cierto éxito desde que asumió el cargo.

El primer acto oficial de Yildirim como candidato ha sido una visita a la provincia kurda de Diyarbakir, donde se reunió con los vecinos del pueblo de Tanisik para expresar su pésame por la muerte de 16 personas en una explosión el jueves pasado. La detonación de un camión de la guerrilla kurda, cargado de explosivos, fue probablemente fortuita.

Al igual que en su breve discurso de aceptación de la candidatura, el aún ministro prometió "sacar la maldición del terrorismo de la agenda de Turquía".

Una vez confirmado Yildirim como jefe del partido, Davutoglu presentará su renuncia a Erdogan y éste encargará al nuevo dirigente del AKP la formación de un gabinete. Una vez formado, el nuevo Gobierno deberá someterse al voto de confianza del el Parlamento, donde el AKP cuenta con 317 de los 550 escaños, por lo que se prevé que Yidirim asuma la riendas del gobierno turco a inicios de la semana entrante.