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El Museo Picasso de Barcelona evoca las 79 exposiciones temporales de sus 50 años de vida

  • El recorrido abarca desde la primera exposición, presentada en 1971
  • Una oportunidad de conocer la evolución de su arte en diferentes disciplinas

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Una visitante junto a un grupo de carteles expuestos en el Museo Picasso.
Una visitante junto a un grupo de carteles expuestos en el Museo Picasso.

El Museo Picasso evoca en una exposición las 79 exposiciones temporales que ha presentado en los 50 años de su historia, en las que ha difundido la obra del pintor malagueño y de artistas de las vanguardias coetáneos.La exposición, con la que el museo barcelonés cierra los actos conmemorativos de su 50 aniversario, es una propuesta eminentemente documental que hace un repaso a las exposiciones organizadas por el centro, convertido en "un viaje por la prolífica trayectoria de Pablo Picasso, sus referentes y los diversos artistas coetáneos", ha explicado la comisaria de la muestra, Montse Torras.

Ese recorrido abarca desde la primera exposición, presentada en 1971, "Obras de Picasso de la Colección de Manolo Hugué", hasta la más reciente, cerrada el pasado 12 de enero, de la donación del fotógrafo David Douglas Duncan. La primera exposición temporal de pintura dedicada monográficamente a Picasso tuvo lugar en 1977, organizada por la Fundación Juan March, que reunió primero en Madrid y luego en Barcelona, 36 obras del artista, muchas de ellas consideradas fundamentales del legado picassiano. Según Torras, las 79 exposiciones han ofrecido al público del museo la posibilidad de disfrutar de obras capitales de Pablo Picasso, como Las señoritas de Avignon, y de conocer la evolución de su arte en las diferentes disciplinas en que trabajó en su vida, desde la pintura a la escultura, o el dibujo, pasando por el grabado, los 'papiers collées' y otras técnicas.

Todas las edades de Picasso

Obras de juventud, de la época azul, de la época rosa, cubistas, neoclasicistas, surrealistas y de la última época se han presentado en todos estos años.

Un Autorretrato (1896) y un óleo de la serie de Las Meninas, dedicado a la infanta Margarita María (1957), ambos de Picasso, una Escena mitológica de Joaquín Torres García (1906) o un Autorretrato (1901) de Manolo Hugué se pueden contemplar en la exposición a modo de pinceladas de lo que han sido esos 50 años de exposiciones temporales.

Diversas fotografías de las propias exposiciones ilustran ese viaje alrededor de Picasso y sus coetáneos de exposiciones como la primera antológica en España, inaugurada en 1982 en el Museo Picasso y en el Museo de Arte Contemporáneo de Madrid; la exhibición de Las señoritas de Avignon en 1988; París-Barcelona, 1888-1937 en 2002 o la más reciente de Picasso ante Degas de 2010.

El conjunto de muestras dedicadas a otros artistas y movimientos artísticos en estas cinco décadas también han ofrecido al espectador una perspectiva clara del arte del siglo XX, con nombres clave como Paul Klee, Georges Braque, Oskar Kokoschka, Henri Matisse, Henri Laurens, Max Ernst, Malevich, André Derain, Raoul Dufy, Albert Gleizes, Rodney Graham, Degas o Santiago Rusiñol.

Cuando Las señoritas de Avigon llegó a Barcelona

La retrospectiva "Oskar Kokoschka" de 1987 supuso un punto de inflexión, recuerda Torras, pues la afluencia de público fue significativamente más elevada que hasta entonces, y otro de los hitos se produjo un año más tarde con la exposición Las señoritas de Avigon que el MOMA cedió para la ocasión a los museos Picasso de París y Barcelona, un cuadro que no ha vuelto a salir del museo neoyorquino desde entonces.

En una de las salas, además de los carteles de las 79 exposiciones, se puede constatar a través de fotografías la evolución, a caballo de las nuevas tecnologías, en la presentación museográfica de las obras expuestas.

Las exposiciones "Picasso erótico" de 1979 y de 2001, y la muestra "Picasso y la estampa erótica japonesa" de 2009 compartían una misma temática, pero el enfoque fue muy diferente en los tres casos, señala la comisaria.

"La primera no incluía préstamos de otras colecciones y solo mostraba obras del museo; la segunda fue una gran antológica, en colaboración con París y Montreal; y la tercera mezclaba obras de Picasso con las de otros artistas y para reflejar el tratamiento de este tema en la cultura japonesa optó por un montaje más intimista".

La muestra se cierra con los catálogos de las exposiciones y una pantalla interactiva que permite al público consultar la ficha informativa de cada exposición, una información que, en palabras del director del museo, Bernardo Laniado-Romero, se integrará en otoño de 2014 en el Centro de Referencia Picassiana en línea del museo.