El salón Gaudí novias de Barcelona mira al pasado en busca de inspiración

• Barcelona celebra la 23 edición de la pasarela nupcial
• Los creadores revisan el look de los años 20 y 30
• Todos los disenadores ponen la vista en el extranjero

El est ilo romántico de Yolancris.

YolanCris, la firma que llevan las hermanas Yolanda y Cristina, ha presentado Ehereal Evanescence, una colección compuesta por cinco líneas bien definidas entrelazadas por la frescura y un aire romántico.

Glint Couture recupera el glamour de las it-girl de los años 30. El estilo de Greta Garbo, Wallis Simpson y Marlene Dietrich, marcado por Chanel, Vionnet o Schiaparelli, se materializas en vestidos de sinuoso satén de seda, con una silueta muy marcada y delicadas aplicaciones de pedrería y perlas. La silueta, como en esa época, va dibujada con caderas estrechas y cintura marcada.

Boho Girl es la línea más juvenil, la que desprende frescura y gracia. Los tejidos naturales recorren la pasarela desprendiendo aromas silvestres y las texturas en plumeti y guipur, que aportan un toque de costura a los diseños.

Llevan seis años consecutivos en esta pasarela

Para las más románticas está la línea Romantic Vintage, que guiña al pasado, a la época de nuestras abuelas que guardaban vestidos en marfil, té o blanco roto, tonos con historia. Vemos espaldas al aire y, como no, detalles retro que aportan un plus al vestido.

Solemnes. Los diseños de la línea Couture Treasure están inspirados en esos vestidos icono que salieron de los talleres de la alta costura, con volúmenes generosos que bailan al caminar.

Menos marcados, pero igual de bellos, son los vestidos de Romantic Tale, una línea tranquila que huye de tendencias para reinterpretar los patrones clásicos que resisten con elegancia el paso del tiempo. Chantilly y tul plisado se decoran con flores, símbolo del romanticismo e imprescindibles, en un ramo o en el vestido, en una cita tan importante.

Moda cien por cien española que Yolanda y Cristina realizan en su taller de Hospitalet de Llobregat y desde donde exportan a los países árabes y Asia.

Pensando en una novia internacional

Los vestidos de Victorio & Lucchino tiene algo especial, un toque único cosido entre las telas que les hace únicos. Para 2014 apuestan por las superposiciones de texturas de diferente naturaleza y con patrones de alta costura.

Sus famosas caracolas han tenido una presencia casi simbólica porque la colección mira hacia una mujer más internacional. Destacan las prendas de abrigo como toreras, levitas y chaquetas que completan un look perfecto para la ceremonia y la fiesta.

Los cuellos y escote, todos distintos, están muy perfilados y vemos diseños con corte imperio, uno de los favoritos de la casa, que se cruzan sobre la pasarela con otros de cintura más marcada o de estilo más clásico.

Mirando al pasado para vestir el presente

Rosa Clará resucita el espíritu de los felices años 20, que lo inundará todo tras el estreno de El Gran Gastby con vestuario de Prada.

La diseñadora trabaja con tejidos de mucho empaque. Otomanes y mikados construyen diseños muy estructurados, recios, que intentan enamorar a novias más clásicas y con un gusto más formal.

Tules, organzas y sedas se alían con novias más jóvenes que prefieren un look menos rígido y apuestan por un vestido bien hecho pero con un toque desenfadado.

Brocados, pedrería, siluetas sirena y escotes en la espalda están al servicio de los diseños más festivos, para novias que caminan hacia el altar imitando a las estrellas de las alfombras rojas.