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Karadzic asegura que se enteró de la matanza de Srebrenica cuando le trasladaron a La Haya

  • El exlíder serbobosnio sostiene que quiso poner fin a la guerra que asoló al país
  • Niega haber ordenado ningún genocidio y que los serbios empezasen la guerra

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Karadzic sonríe ante el Tribunal sobre Crímenes de la ANtigua Yugoslavia en el comienzo de su defensa.
Karadzic sonríe ante el Tribunal sobre Crímenes de la ANtigua Yugoslavia en el comienzo de su defensa.

El exlíder serbobosnio Radovan Karadzic ha asegurado en el Tribunal Penal Internacional para la antigua Yugoslavia (TPIY) que no supo hasta llegar a La Haya del genocidio de Srebrenica, donde en 1995 perecieron a manos de una ofensiva serbobosnia cerca de 8.000 musulmanes varones.

"Nunca había oído hablar de lo ocurrido hasta que llegué aquí", ha mantenido en el alegato de su defensa Karadzic, quien ha añadido que "no había indicios de que hubiera habido civiles asesinados" en ese enclave de Naciones Unidas, que en 1995 estaba protegido por "cascos azules" holandeses.

El acusado ha asegurado que jamás recibió información alguna "ni de un simple abuso ni de un simple crimen en Srebrenica".

Karadzic, que este martes ha mantenido que se limitó a "defender" la unidad territorial de la antigua Yugoslavia, está acusado, entre otros cargos de crímenes de guerra y lesa humanidad, del genocidio en 1995 de casi 8.000 musulmanes varones en la localidad de Srebrenica.

El presunto criminal de guerra ha admitido que "dio una orden para actuar en Srebrenica", pero ha especificado que se trataba de una "operación militar para crear un corredor" que separara las localidades de Srebrenica y Cepa y así poder transportar equipos militares.

Karadzic ha indicado que "frenó muchas veces" al ejército serbobosnio y que cuando dio su aprobación para entrar en Srebrenica, el fin era "proteger a civiles y musulmanes".

"Por qué querríamos expulsar a alguien (en referencia a la población musulmana) cuando le estamos ofreciendo una policía propia", se ha preguntado retóricamente ante los jueces, antes de asegurar que los serbobosnios "confiaban en una solución".

Se considera "pacifista"

Calificando en todo momento su actuación de "pacifista",  Karadzic ha expuesto a los jueces que se encontraba "en una situación imposible", en la que exponía a su "propia población" al hacer concesiones a los musulmanes.

Karadzic, de 67 años, se mostró confiado en su defensa aduciendo que "la verdad está de nuestro lado" y ha incidido en que hizo "todo lo posible para evitar la guerra y minimizar sus consecuencias", algo por lo que a su juicio, tendría que "ser premiado".

Definiéndose como un hombre culto y "de formas suaves, que sabe entender a otros", Karadzic ha asegurado que nunca discriminó a la población musulmana de Bosnia, a la que acusó de haber iniciado el conflicto.

"Es una equivocación pensar que los serbios empezaron la guerra en Bosnia (...) el inicio de la guerra no tiene nada que ver conmigo", ha sostenido ante los jueces.

"Yo nunca permití el más mínimo crimen, y menos crímenes en masa", mantuvo en su alegato, antes de afirmar que "nadie podía pensar que pudiera ocurrir un genocidio de personas a las que considerábamos iguales".

Karadzic, que ha afirmado que se limitó a "defender" la unidad territorial de la antigua Yugoslavia, está acusado, entre otros cargos, de crímenes de guerra y lesa humanidad por el genocidio en 1995 de casi 8.000 musulmanes varones en la localidad bosnia de Srebrenica.

Sobre el asedio de Sarajevo, ha declarado que siempre ha sentido "verdadero horror por técnicas como las de los francotiradores, aunque ha reconocido que "es una estrategia militar posible".

Se espera que Karadzic, que cuenta con un total de 300 horas para desarrollar su defensa, llame este martes al primero de sus testigos

Los magistrados negaron recientemente su petición para que fuese el TPIY quien financiase en su totalidad al equipo de asesores legales que ha contratado y a cuyo pago Karadzic tendrá que contribuir parcialmente.