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El Supremo italiano ordena que se repita el juicio por un caso de los vuelos secretos de la CIA

  • Establece una indemnización de 1,5 millones de euros para el imán Abu Omar
  • Fue secuestrado  en febrero de 2007 para trasladarlo a Alemania y El Cairo
  • Es el único caso juzgado  en Italia por los secuestros que realizó la CIA tras el 11 de septiembre

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Las acciones criminales no se pueden cubrir tras el epígrafe de secreto de estado. Lo determina el Tribunal de Casación italiano en el caso Abu Omar y los vuelos secretos de la CIA.  Con esta sentencia , cuyas motivaciones se harán públicas dentro de dos meses,  se da un paso más en el único caso juzgado  de los secuestros que realizó personal de la CIA tras el 11 de septiembre.

El imán de Milán fue secuestrado  en febrero de 2007 para trasladarlo a Alemania y El Cairo. Casi un año después, Abu Omar reaparece en una cárcel egipcia y denuncia haber sido secuestrado y torturado por personal de la CIA. En 2006 se arresta al número dos de la inteligencia italiana, Marco Mancini y al general Pignero.

Posteriormente, el número uno de la inteligencia Nicolò Pollari apela al secreto de estado como defensa. Tras un año de deliberaciones, le sirve para que tanto él como el número 2 sean absueltos  en 2010 por la Corte Constitucional. Ahora se determina que pueden ser juzgados.

Indemnización de 1'5 millones de euros

El Tribunal Supremo establece una indemnización de 1’5 millones de euros para Abu Omar y la prisión para los funcionarios de EE UU que participaron en la acción. 

Los agentes de la CIA están prófugos de la justicia desde 2005 y Estados Unidos ha dicho que nunca los entregará.

Pero el caso no termina aquí. En el laberíntico  camino de la justicia italiana, toca ahora el turno a la Corte de Apelación de Milán. Y como ocurre tan a menudo en Italia, el fantasma de la prescripción planea sobre el caso.

El tiempo para dictar sentencia expira en febrero de 2013 aunque se le puede añadir el año  de 'impasse' en que se analizó la viabilidad o no del secreto de estado propuesto por el jefe de los servicios secretos italianos