Enlaces accesibilidad

Los rebeldes libios se comprometen a una democracia que huya de "ideologías extremistas"

  • El líder del CNT pide contención ante 10.000 seguidores
  • Familias enteras abandonan Bani Walid
  • Los combatientes aseguran que los gadafistas usan a los civiles como escudos 

Ver además:Ver además: Especial sobre las revueltas árabes

Por
Mustafá Abdel Jalil anuncia que Libia será una democracia musulmana

El líder del Consejo Nacional de Transición (CNT, órgano unitario de los rebeldes libios) ha hecho este lunes su primer discurso en la capital del país, Trípoli.

Mustafá Abdel Jalil ha hablado ante unas 10.000 personas en la Plaza Verde, antiguo lugar de reunión de las multitudes que aclamaban a Muamar al Gadafi, y renombrada como Plaza de los Mártires.

El líder rebelde ha hecho un llamamiento para la contención.  "Queremos un estado de derecho, prosperidad y un estado donde la sharia (ley islámica) sea la principal fuente de legislación, y esto requiere muchas condiciones", ha asegurado, para añadir que no serán toleradas "ideologías extremistas". El mensaje está destinado a tranquilizar a los aliados europeos y estadounidenses que desconfían de la presencia de islamistas entre los opositores.

"Necesitamos llevar a los tribunales a cualquiera que haya dañado al pueblo libio de cualquier forma. El sistema judicial decidirá", ha declarado Abdel Jalil, quien ha pedido que no se cometan actos de venganza.

Resistencia en Bani Walid

Mientras tanto, las fuerzas del CNT, que tomaron Trípoli el 23 de agosto, continúan encontrando resistencia en Bani Walid, 150km al sureste de la capital, y avanzan hacia Sirte.

Los habitantes de Bani Walid que han podido huir hablan de combates callejeros, y los aviones de la OTAN sobrevuelan la zona. Familias enteras han abandonado la ciudad en vehículos abarrotados después de que las fuerzas gadafistas abandonaran algunos puestos de control en las afueras. "Nos vamos por los cohetes, están cayendo cerca de las viviendas", ha declarado a Reuters Ali Husain.

Algunos combatientes rebeldes sospechan que miembros de la tribu local, la de los warfalla, están pasando información a los gadafistas.  "Creemos que hay traidores entre ellos", ha declarado Mohammed el Gahdi, miliciano de la ciudad de Joms.

Un portavoz militar del CNT, Ahmed Bani, ha asegurado a Reuters que de momento sus fuerzas van a esperar. "Cuando entramos en Bani Walid encontramos a las brigadas de Gadafi usando a civiles como escudos humanos", ha afirmado. Según su versión, hay lanzaderas de cohetes situadas en las azoteas de edificios de viviendas, por lo que no puede usarse la artillería ni los bombarderos.

Naciones Unidas ya había advertido de la preocupante situación humanitaria de los civiles atrapados en las ciudades que aún resisten a los rebeldes. "Nuestra gran preocupación ahora es Sirte, estamos recibiendo informes de que falta agua y electricidad", ha declarado el jefe de las labores humanitarias de la ONU, Valerie Amos.