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El partido laborista australiano pierde su ventaja a un día de las elecciones

  • De acabar así, aparecería el primer gobierno sin mayoría absoluta en 70 años
  • El cocodrilo Harry ha apostado por el partido laborista

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La Primera Ministra Julia Gillard ha perdido ventaja en las últimas encuestas
La Primera Ministra Julia Gillard ha perdido ventaja en las últimas encuestas

El Partido Laborista de la Primera Ministra, Julia Gillard, ha perdido la ventaja en las encuestas frente a la conservadora Coalición Liberal, liderada por Tony Abbot, a un día de las elecciones parlamentarias en Australia.

Su reducida ventaja supone que nada está decidido y cualquiera puede ganar. Esto supondría el primer gobierno minoritario en este país en 70 años.

El empate técnico entre las principales formaciones políticas muestra un  cambio significativo respecto a las encuestas de hace una semana,  cuando Gillard contaba con un respaldo del 53 por ciento frente al 47  por ciento de los conservadores liderados por Tony Abbott.

Esta lucha también se ha trasladado a los kioskos. Mientras que el Sidney Daily Telegraph invita a los votantes que apoyen al partido conservador con un título que nos traslada a EE.UU: "Yes, he can", The Sydney Morning Herald apuesta por una "segunda oportunidad para los laboristas" después de que consiguieran evitar la recesión en el país.

"Esta es una dura y disputada competición y en una dura y disputada competición el único riesgo es que Abott será Primer Ministro este domingo", ha asegurado el líder conservador.

"¿Por qué los australianos confían en Gillard cuando ni siquiera Kevin Rudd no lo hizo?", ha comentado Abott.

Por su parte, la actual Jefa de Gobierno, después de que Kevin Rudd perdiera popularidad, ha asegurado que "será devastador si se levanta el domingo y el señor Abbott es Primer Ministro".

Los laboristas ganan en las casas de apuestas

A pesar del bajón que ha sufrido el partido laborista continúan liderando las apuestas.

Sobre todo después de que el cocodrilo Harry,  simulando al pulpo Paul en el mundial, se decantara por el pollo de los laboristas.

De esta manera las propuestas de Gillard como la de plantear que Australia vuelva a ser una república parecen agradar más a la población "aussie".

Por su parte el líder de la oposición mantiene su negativa postura contra la investigación científica con células madre, los matrimonios entre homosexuales y el aborto.