EE.UU. invertirá 385 millones en proyectos de ayuda a Pakistán para ganarse a la población civil
- Clinton hace el anuncio durante una visita de dos días a Pakistán
- Quiere que la relación entre ambos países vaya "más allá de la seguridad"
La secretaria de Estado de EE.UU., Hillary Clinton, ha anunciado que su país dará más de 500 millones de dólares (385 millones de euros) a Pakistán para nuevos proyectos de ayuda no militar en un movimiento que busca ganarse a la población escéptica o abiertamente antiamericana de un país que es un aliado vital para ganar la guerra en Afganistán.
Clinton ha hecho este anuncio en su visita de dos días a Islamabad, la capital de Pakistán, como parte del diálogo Pakistán-EE.UU., que Washington quiere que fortalezca la cooperación entre ambos países para luchar contra Al Qaeda y los talibanes.
"Por demasiado tiempo nuestros dos países han sufrido las dificultades de un déficit de confianza que nos ha hecho vacilar. Compartimos las razones y aceptamos nuestra responsabilidad por el papel que han jugado nuestras acciones, pero necesitamos reconstruir esa confianza", ha subrayado Clinton durante un encuentro en un ayuntamiento paquistaní.
Antes, Clinton ha declarado en rueda de prensa junto a su homólogo paquistaní, Shah Mehmud Qureshi, que ambos países están comprometidos a tener "una relación que vaya más allá de la seguridad".
Diálogo estratégico
Clinton y Qureshi han encabezado sus respectivas delegaciones en la segunda ronda ministerial de diálogo "estratégico" entre ambos países, después de la celebrada en Washington el pasado marzo.
Tras meses de encuentros sectoriales de 13 grupos de trabajo en ámbitos como defensa, educación o energía, Clinton ha desgranado los primeros proyectos que EE.UU. financiará con el plan de asistencia civil aprobado a fines de 2009.
Entre las iniciativas, mostradas en mapas, se hace hincapié en sectores en grave crisis como el del agua y el energético, a través de la construcción de embalses, renovación de infraestructuras o potenciación de la capacidad de generación.
También figuran proyectos en materia de salud, como la creación de hospitales en varias ciudades, y otros orientados al crecimiento económico o a la agricultura, como un acuerdo para exportar a EE.UU. mangos, una fruta emblemática en Pakistán y "deliciosa", según Clinton.
"Es fundamental que mantengamos este impulso", ha expresado visiblemente optimista Clinton, antes de añadir que todas estas acciones "son una prueba del compromiso" para desarrollar una relación estratégica con Pakistán duradera, que redunde en "paz" y "prosperidad" para el pueblo paquistaní.
De 'hablar' a 'escuchar'
"Hay una gran diferencia entre hablar y escuchar. Ya no estamos sólo hablándonos sino escuchándonos", ha defendido Qureshi, quien ha aplaudido que la apretada agenda de contactos de los últimos meses haya dado resultados y permitido que se pase a la fase de implementación.
Qureshi ha enfatizado la necesidad de "comunicar mejor", de hacer "diplomacia pública", y ha expuesto que la opinión de los paquistaníes respecto a EE.UU., aún bastante negativa según los sondeos, "cambiará cuando la gente vea cómo cambian sus vidas con esta nueva relación".
Washington considera a Pakistán un aliado clave en la región para el éxito de las fuerzas internacionales en el vecino Afganistán, adonde Clinton se desplaza hoy para asistir mañana a la Conferencia de Kabul junto a delegados de 70 países, de la ONU y la OTAN.
Con este paquete de asistencia para Pakistán que ahora empieza a desarrollarse, EE.UU. sitúa casi al mismo nivel la ayuda civil y la militar; esta última había sido hasta ahora muy superior y asciende a más de 12.000 millones de dólares desde 2001, según fuentes oficiales estadounidenses.