Uganda encuentra un cinturón-bomba y detiene a varias personas por el sangriento atentado

• Aún se desconoce el número y la procedencia de los arrestados
• Al Shabaab afirma que las bombas fueron plantadas

La policía ugandesa llega al lugar del atentado del pasado domingo.

Un nuevo cinturón-bomba que no hizo explosión durante los atentados del pasado domingo ha sido encontrado en la capital ugandesa, Kampala, concretamente en el distrito de Makindye, lejos de las otras dos zonas afectadas.

Horas después de la catástrofe,  los islamistas somalíes reconocieron los ataques, que acabaron con la vida de 76 aficionados que veían la final de la Copa del Mundo, y amenazaron continuar con la violencia en Burundi y Uganda hasta que sus gobiernos no retiren las tropas de la misión de la Unión Africana en Somalia (AMISOM).

"No hay paz para mantener en Somalia, y Uganda no tiene ningún interés estratégico allí. Estamos sacrificando a nuestros hijos para nada", comentaba Wafula Oguttu, portavoz del partido de la oposición, Foro por el Cambio Democrático (FDC).

Asímismo, AMISOM ha afirmado que las explosiones no afectarán a su misión en Mogadiscio (Somalia), donde están protegidos el palacio presidencial, el puerto y el aeropuerto de los ataques insurgentes.

Diversos arrestos

El hallazgo del cinturón-bomba no fue la única actuación de la policía ugandesa. Posteriormente se produjeron diversos arrestos, aunque todavía no se ha dado a conocer el número exacto ni la procedencia de los mismos.

Lo que de momento se conoce es que estos ataques tienen el sello de Al Qaeda y grupos ligados a la red islamista de Osama Bin Laden.

Las bombas fueron plantadas

El asistente del portavoz del grupo islamista, que se ha dado a conocer como 'Yonis', ha negado vía telefónica que extremistas suicidas tuvieran algo que ver con los ataques de Kampala.

"La rabia bendice a aquellos que preparan el ataque y esperan tener una larga vida. Esto muestra que no fue un suicida. Fue una bomba plantada", ha confirmado Yonis.

A pesar de estas declaraciones, la policía del país mantiene su postura, sobre todo después de haber encontrado en el tercer distrito vestimentas propias de un suicida, por lo que se plantean que pudo ser plantada y usada como improvisación.

El FBI entra en la investigación

Después de que apareciera un americano entre los muertos, el FBI (Oficina Federal de Investigación) ha ofrecido ayuda a las investigaciones.

Por el momento tres agentes se encuentran ya en terreno ugandés, y otro equipo está a punto de partir, tal y como ha confirmado el Departamento Estatal.

Por su parte, los expertos recomiendan que las amenazas de la guerrilla Al Shabaab se tengan en cuenta, sobre todo después de los sangrientos ataques del pasado domingo.

Aún así tan sólo un ataque aislado no debería perjudicar a la inversión de empresas petrolíferas situadas en la frontera oeste limítrofe con la República Democrática del Congo.

Tampoco tendría por qué afectar a la celebración de la próxima reunión de la Unión Africana que se celebrará al mes que viene en este país del este africano.